Rosa Díez deja el PSOE para «defender» sus ideas en el partido de ¡Basta ya!

SAN SEBASTIÁN. DV. La eurodiputada socialista Rosa Díez confirmó ayer en Bilbao que deja el PSOE y que trabaja junto a los representantes de la plataforma ¿Basta ya! en la puesta en marcha de un nuevo partido «español», sin «hipotecas» con los nacionalistas y en el que aspira a defender «en libertad» sus ideas socialistas. Díez denunció la deriva de su ya ex partido y acusó a sus dirigentes de imponer una estrategia política unilateral sin debate ni consultas previas. Reprochó además al presidente del Gobierno que haya pactado con fuerzas nacionalistas que «no creen en el Estado».

Díez eligió un céntrico hotel bilbaíno, escenario durante muchos años de los principales actos del PSE, para confirmar que abandona el partido en el que ha militado los últimos 30 años, que ha entregado a su grupo el acta de eurodiputada y que así se lo ha hecho saber al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, mediante carta certificada enviada el miércoles.

Con gesto sonriente que no ocultó, sin embargo, la importancia del paso dado, la ex militante socialista compareció sola y justificó su decisión en los cambios de política marcados de forma unilateral por la dirección del PSOE así como por sus discrepancias con el modelo de Estado y con la política antiterrorista del Gobierno.

En este sentido, se mostró convencida de que el proyecto socialista es el que ella defiende, y no el que desarrolla la actual dirección. «He tomado la decisión de irme del PSOE para poder defender con más libertad y sobre todo con más eficacia aquellas ideas por las que, hace más de 30 años, me afilié al PSOE y aquellas ideas con las que me presenté a las últimas elecciones, que no son otras que el programa del PSOE», aseguró de forma contundente.

Compromisos

En esta línea crítica, cargó contra sus antiguos compañeros y no ocultó sus discrepancias con la ortodoxia marcada por la dirección federal, cuando dejó claro que entre la disciplina del PSOE y el compromiso con los ciudadanos se queda con lo segundo. Insistió que si tenía que «decidir entre la instrucción del partido de cambiar de política sin explicárselo a nadie y sin que esté de acuerdo o cumplir con un compromiso adquirido con los ciudadanos, me quedo con lo segundo». «Por supuesto, siempre y a lo largo de toda mi trayectoria, creo que mi deber está con los ciudadanos», señaló en un intento de justificar su salida del partido ahora tras más de cuatro años de continuas controversias.

Las críticas alcanzaron también a Rodríguez Zapatero, a quien acusó de pactar «con nacionalistas que no creen en el Estado» cuestiones «claves» para el Estado español, como son, a su juicio, el modelo territorial o la lucha antiterrorista.

El abandono de la militancia socialista no significa sin embargo que Rosa Díez deje la política. Bien al contrario, y aunque dijo que volverá a su puesto de funcionaria, anunció que se dedicará «en cuerpo y alma» y «a tiempo completo» al «nuevo proyecto» de partido que ultima la recién creada Plataforma Pro y que, bajo el impulso de ¿Basta ya!, saltará a la arena política el 7 de septiembre ara concurrir a las elecciones generales de marzo.

Díez subrayó que, a diferencia del PSOE, esta nueva formación arrancará «desde una posición inequívocamente nacional en términos de español que no tenga hipoteca ni complejos y que sea capaz de plantear el problema con toda claridad; el problema y las soluciones». «Ésta será una de las tareas a las que tendrá que dedicarse, a definir estas cosas», insistió Díez que defendió su trayectoria política en la que, dijo, «nunca he descalificado a nadie personalmente, siempre he buscado defender con mis mejores argumentos porque he tratado siempre de convencer las cosas en las que creía y de rebatir aquellas políticas que creía que eran perjudiciales para los ciudadanos».

El anuncio fue acogido sin sorpresas y con críticas por el PSE-EE. Su portavoz, Rodolfo Ares, aseguró que «hace tiempo que venía atacando las tesis del PSOE y defendiendo las del PP». Ares consideró que la baja de Díez se puede calificar como la «crónica de una salida anunciada» y opinó que lo relevante, a juzgar por la actuación de la eurodiputada, «es que no se haya producido antes».

El dirigente socialista insistió en que las declaraciones de Díez «confirman que desde hace tiempo está trabajando desde dentro del PSE-EE para constituir otro grupo» y que esto «demuestra su poca lealtad con el partido y también su poca coherencia personal y política».