El consenso sobre la línea política del PNV facilita un pacto para que se presente Imaz

SAN SEBASTIÁN. DV. La unanimidad alcanzada en el seno del Euskadi Buru Batzar alrededor de su futura ponencia política facilita en principio la consecución de un pacto interno que garantice la reelección de Josu Jon Imaz como presidente del PNV al frente de una ejecutiva que aglutine a las diferentes sensibilidades de esta formación. El documento, que será distribuido hoy, abre las puertas a una consulta popular si no se alcanzase un acuerdo entre partidos sobre el derecho de decisión., Esta fórmula representa una síntesis entre las posiciones más pactistas y más soberanistas en la formación jeltzale.

Oficialmente, el líder del EBB -que ayer se encontraba de visita en Barcelona con motivo de la Diada- aún no ha revelado su intención final. Los sectores más afines a Imaz confían en su presentación al frente de una única lista en las próximas semanas.

Al mismo tiempo, desde la ejecutiva jeltzale se asegura que este acuerdo sobre la línea política del PNV no tiene por qué determinar la existencia de un acuerdo para que prospere una única candidatura al EBB ya que el proceso electoral interno contempla los mecanismos para que puedan presentarse diferentes aspirantes si cuentan con el aval de las asambleas locales y de las territoriales. Así lo admitió el pasado lunes por la noche la secretaria del EBB, Josune Ariztondo, que se empeñó en diferenciar los dos procesos, el de la actualización del rumbo estratégico del partido y el de la renovación de cargos.

No obstante, fuentes nacionalistas consideran que este compromiso alcanzado en la dirección del PNV entre sus diferentes sensibilidades facilita que Imaz continúe como presidente y que el lehendakari Juan José Ibarretxe sea el candidato del PNV a la reelección en las próximas elecciones autonómicas. La corriente más soberanista del partido considera clave la continuidad de Ibarretxe como principal garantía de su estrategia política, centrada en el reconocimiento del derecho de decisión y en la realización de una consulta popular.

Imagen de unidad

La satisfacción por la imagen de unidad interna era ayer la tónica predominante tras la reunión del EBB del pasado lunes, que dio luz verde definitiva al borrador de la ponencia política a la espera de que sea hoy distribuido a las organizaciones territoriales y municipales y enviado a la militancia del partido para su posterior debate antes de la asamblea general prevista los próximos 1 y 2 de diciembre. El texto se reafirma en una estrategia para impulsar el derecho de decisión y para que cristalice su ejercicio de forma pactada con otras fuerzas políticas. La dirección del PNV guarda un mutismo absoluto sobre el contenido de esta ponencia aunque lo que ha trascendido hasta el momento permite aventurar que no guardará diferencias de fondo con anteriores iniciativas del PNV. La última ponencia aprobada en 2004 -con Imaz ya de presidente- era muy similar a la titulada «Ser para decidir», acordada en 2000 con Xabier Arzalluz al frente del EBB y que tenía un claro sesgo soberanista.

El documento de síntesis logrado entre los diferentes sectores del PNV -los más pactistas y los más soberanistas- consideran que el reconocimiento del derecho de decisión es la vía adecuada para la normalización política de Euskadi. Asimismo, el texto propone que las fuerzas políticas vascas alcancen un pacto en este sentido y recomienda que sea acordado entre las instituciones vascas y españolas. egún ha podido conocer DV, el contenido de la ponencia abriría también las puertas a una posible consulta popular, aunque la inscribiría como una «herramienta» que podría utilizarse para el desbloque de una determinada situación política de empantanamiento.