Piden 9 años para un interventor municipal de Elgoibar acusado de malversación

SAN SEBASTIÁN. DV. La Fiscalía de la Audiencia de Gipuzkoa solicita a un antiguo interventor del Ayuntamiento de Elgoibar una pena de nueve años de prisión por apropiarse, presuntamente, de diversas cantidades de dinero de las arcas públicas.

Los hechos, según el escrito de calificación redactado por el ministerio fiscal, tuvieron lugar en 2001 cuando el acusado, P.O.A., interventor del Ayuntamiento de la localidad desde 1979, ordenó a la tesorera que le entregase en efectivo con cargo a las arcas municipales la cantidad de 3.906,58 euros. La funcionaria municipal extrajo el dinero de una cuenta bancaria de titularidad municipal, y se lo entregó en mano al acusado, quien, según el fiscal, «lo incorporó a su patrimonio», si bien simuló que los destinaba a la Asociación de Agricultura de Montaña, Debemen, en concepto de trabajos de limpieza de corte de hierba y poda de árboles, entre otros.

Posteriormente, en marzo de 2002, el acusado ordenó de nuevo a la tesorera que le hiciese entrega de 3.455,82 euros que, al igual que la ocasión anterior, se los quedó para sí, aunque documentó que los ingresaba en la Escuela de Música Inazio Bereciartua bajo el concepto de «aportación para los componentes de bandas de música, txistularis y dulzaineros.», precisa la Fiscalía.

Una vez descubierto los hechos por la corporación, el acusado fue requerido para que diera explicaciones. Fue entonces cuando decidió devolver la suma destinada a la escuela de música que la ingresó en la cuenta corriente de la fundación.

Según la Fiscalía, los hechos son constitutivos de sendos delitos de malversación de caudales públicos por cada uno de los cuales solicita cuatro años y seis meses de prisión. Asimismo, pide que devuelva el dinero del que presuntamente se apropió.

El delito de malversación es competencia de un jurado, por lo que P.O.A. será juzgado por este tribunal.

Absuelto de maltrato. Un hombre al que su mujer había acusado de propinarle una paliza, que entre otras lesiones le provocó la pérdida de un diente, ha sido absuelto de este delito por la Audiencia de Gipuzkoa a raíz de las contradicciones en las que la presunta víctima incurrió durante la vista oral. Según la sentencia del caso, la mujer, que tenía una orden de alejamiento de su marido dictada por un juzgado de Bergara, declaró durante el juicio que fue agredida el 19 de febrero de 2004, día en que salió de su casa muy temprano, a una hora inusual, y al llegar a la calle el acusado la abordó, le insultó y le dio varios puñetazos y patadas, la zarandeó y la agarró del cuello.

La sentencia explica que este testimonio no concuerda con la denuncia que la supuesta víctima hizo el mismo día de los hechos, cuando dijo que el hombre, J.J.H., para el que el fiscal pedía seis años y seis meses de prisión, le dio un único puñetazo en la cara. También llama la atención del tribunal que el médico no apreciara «hematoma alguno».