

Secciones
Servicios
Destacamos
CRISTINA TURRAU cturrau@diariovasco.com
Jueves, 22 de noviembre 2007, 02:22
Los menores inmigrantes que llegan solos a Gipuzkoa buscan trabajo. Antes, sin embargo, deben solucionar cuestiones burocráticas y de integración. Por eso necesitan «una actividad controlada». Es la opinión de Lucía Arias, miembro del grupo de trabajo de menores de SOS Arrazakeria-SOS Racismo, que ha participado esta semana en unas jornadas organizadas por la entidad.
- ¿'Menores inmigrantes no acompañados' equivale a 'problemas'?
- No necesariamente. Antes que inmigrantes son menores, que pueden tener los problemas y dificultades propias de su edad. Son adolescentes sin una familia de referencia. Algunos pueden estar en acogida, pero la mayoría están en desamparo. Han hecho solos el viaje de llegada.
- ¿Cuál ha sido la trayectoria de los chavales que llegan a Gipuzkoa?
- Buscan mejorar sus condiciones de vida y las de sus familias. Dicen que allí no tendrían esta situación. Lo ven en la tele o en las personas que vuelven a su país. Vienen buscando trabajo.
- ¿En algún momento se tuercen sus expectativas?
- Encuentran muchas dificultades. Por ejemplo, la falta de documentación. Para acceder a un taller o al mundo laboral necesitan una documentación y los plazos para conseguirla son lentos. También hay menores que cumplen los 18 años y se quedan en la calle. O que han llegado en una situación límite, a los 17 años y medio, y no ha habido tiempo para acabar la tramitación.
- ¿Cuántos menores hay en Gipuzkoa en esta situación?
- Según los últimos datos de la Diputación, en lo que va de año hay 219 chavales, la mayoría marroquíes, que han iniciado los papeles para poder trabajar. Generalmente no traen documentación y cuando la Policía los detecta se les hace la prueba de edad, a través de la muñeca. Antes se les mandaba al centro de Tolosa. Ahora está en obras y van a Segura. En Tolosa están los de 15 a 17 años. Los más pequeños van a Urnieta.
- Sus expectativas empiezan así a cambiar...
- Muchos piensan que al llegar van a poder trabajar. Generalmente les mandan a clases de castellano, que se imparten mediante voluntariado, a través de la Cruz Roja. No se dan en el propio centro, lo cual es una dificultad. Porque mientras están allí podrían aprovechar el tiempo.
- ¿Cómo habría que apoyarles?
- Hay quien dice que si se les trata muy bien vendrán más, pero la realidad es otra. Aunque pongan vallas, van a seguir llegando. El problema es más profundo y se debe a la situación de pobreza existente. Hay que proporcionarles una formación que les abra posibilidades de trabajo. Los talleres son su objetivo.
- Y los chicos, ¿responden?
- Muchos van a la Fundación Peñascal en Tolosa a talleres de soldadura o carpintería. Tienen muy buena actitud para el trabajo y cumplen muy bien los horarios, a no ser de que haya un problema específico.
- ¿Qué falla entonces?
- El recurso de la vivienda. En el centro de Tolosa deberían estar tres meses y después pasar a un lugar donde el chico pueda desarrollar su autonomía.
- ¿Cuál ha sido en su opinión la causa de los problemas en Tolosa?
- La falta de recursos humanos. Hay muy pocos educadores para tantos chicos. Y no hay actividades en el centro.
- Con la apertura de nuevos centros, ¿se reconduce el problema?
- Desde Diputación se decía que las pensiones eran un plan estrella, porque así los chavales desarrollaban hábitos de independencia. Pero era erróneo. ¿Cómo puedes tener a un chico de 15 ó 16 años solo en una pensión con un educador que va cada dos días? Algunos están en Deba y se levantan a las seis de la mañana para llegar a Tolosa. Pero también hay quienes no pueden estar solos. Montan ruido y molestan.Y eso crea caos. Un menor de cualquier procedencia necesita una actividad controlada. Requiere cuidados y seguimiento.
- Dice que los jóvenes inmigrantes tienen algo que enseñar a los de aquí...
- Tienen mucho valor para salir de casa con trece o catorce años, poner en riesgo su vida y viajar en los bajos de un autobús para hacerse cargo de la economía familiar.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El origen de la expresión 'joder la marrana' y su conexión con el vino
El Norte de Castilla
Los libros vuelven a la Biblioteca Municipal de Santander
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.