El Bidasoa-Irun perdió dos puntos y parte de su autoestima en Cuenca, donde ya otean la Asobal

IRUN. DV. Tendrá mucho encanto, pero la visita a Cuenca no va a ser, ni mucho menos, la que mejor recuerdo deje al Bidasoa-Irun esta temporada. Por lo menos, visto lo visto hasta ahora. Los irundarras acudieron esperanzados a visitar al líder, pero se vieron empequeñecidos por un equipo que ya huele a Asobal. Y es que ha ganado quince de los dieciséis partidos disputados.

El primero de la segunda vuelta no empezó mal para el Bidasoa, que mantenía el pulso en el primer tercio del choque. Desventajas mínimas y empates eran buen presagio, pero el decorado cambió radicalmente hacia el minuto veinte. La lesión de Duric dejó a los irundarras sin un referente y el Cuenca aprovechó el desconcierto amarillo para romper el partido con diez minutos pletóricos y un 17-8 al descanso. La gran efectividad local contrastaba con los problemas que el Bidasoa tenía para hacer gol.

Derrota muy abultada

En el segundo tiempo, con un buen Yeray y el retorno a pista de Duric, los irundarras se acercaron en el marcador (17-11) pero el Cuenca demostró que está por encima de los amarillos y, con numerosos goles de contraataque, fue engordando su renta hasta conseguir esa victoria por 30-18.

Perder en una cancha que el año próximo será de Asobal entraba dentro de la lógica, pero no la manera en la que se produjo. Ésta es la derrota más abultada que ha sufrido el Bidasoa-Irun en lo que va de temporada y, curiosamente, llega justo a la semana siguiente de su más clara victoria, la de Cangas (21-28).

A la lógica decepción sigue el retroceso de dos puestos en la clasificación, aunque manteniendo la misma distancia con la promoción, un punto, pues los cuatro últimos perdieron.

Duric podrá jugar

La buena noticia fue que la lesión de Vladimir Duric no reviste gravedad. El central serbio se lastimó un dedo de la mano izquierda y el lunes se pudo comprobar que la luxación no había afectado a los tendones. Duric tendrá molestias durante cerca de diez días, pero podrá jugar con un vendaje, pues la lesión se ha producido en su mano mala.

Así, y si nada raro sucede en los últimos entrenamientos de la semana, Aitor Etxaburu tendrá disponibles a todos sus hombres para recibir el sábado en Artaleku (18.30 horas) al Palma del Río. Con este partido se inicia una serie de enfrentamientos ante rivales directos, pues el Bidasoa se enfrenta a un rival que le saca un punto, visitará después al Pozoblanco (cinco puntos más), recibirá al Naranco (un punto menos), visitará al Toledo (cuatro puntos más) y recibirá al colista Tres de Mayo (nueve menos).