Un informe indica que el quinto contenedor es más eficaz que el puerta a puerta de Usurbil

DV. El quinto contenedor parece que es más efectivo para la recogida de basura orgánica que el sistema puerta a puerta. Esta es al menos la conclusión a la que llega el Consorcio de Residuos de Gipuzkoa tras estudiar los datos aportados por la planta de compostaje de Lapatx (ver gráfico).

A estas instalaciones llegan los residuos orgánicos domiciliarios que se recogen hasta ahora en el territorio y, por tanto, dispone de datos precisos de cada municipio.

Los informes aportados por Lapatx servirán para establecer, en base a datos objetivos, qué sistema de recogida logra mejores resultados.

El quinto contenedor cuenta con el respaldo de la Diputación. Al mismo se ha sumado San Sebastián y progresivamente lo harán la mayor parte de los municipios guipuzcoanos.

El sistema puerta a puerta lo lidera la Mancomunidad de San Marcos, gobernada por EB y ANV. En opinión de sus promotores, esta alternativa haría innecesaria la construcción de la incineradora.

De momento, sólo se cuenta con datos de experiencias piloto. El quinto contenedor, destinado exclusivamente a restos de comida, se ha instalado en las calles de Aretxabaleta, Azkoitia, Azpeitia, Zarautz, Zumaia y en el barrio donostiarra de Amara. Su uso es simple. El iglú dispone de una llave y sólo puede ser abierto por los ciudadanos que previamente han mostrado su interés en el reciclaje orgánico. Éstos habrán recibido con anterioridad información sobre el tipo de restos que se pueden depositar.

El sistema puerta a puerta se inició en marzo en Usurbil. Esta localidad retiró los contenedores de la calle e instaló en el exterior de cada portal una estructura metálica con ganchos donde los vecinos cuelgan los cubos o bolsas de basura. Cada día de la semana se deposita un tipo de residuo, en horario de 6.30 a 8.30 de la mañana. Los lunes, orgánicos; martes, envases; miércoles, papel y cartón; jueves, orgánico; viernes, envases; sábado, orgánico y domingo, los restos no asimilables a los citados.

En el caso de que se deje un residuo distinto al prefijado, el operario avisa al vecino del error cometido. Cada cubo y gancho dispone de un código que identifica al vecino correspondiente.

Hasta el momento no se disponía de datos fidedignos sobre los resultados de ambos sistemas. Los aportados ahora por la planta de Lapatx ofrecen todas las garantías, dado que en la planta pesan los residuos orgánicos que llegan de cada municipio. En el primer semestre del presente año se han descargado 800.000 kilos, la mitad de ellos procedentes del quinto contenedor de los seis municipios citados y del puerta a puerta de Usurbil.

Azpeitia encabeza el ránking de localidades que más compostan de Gipuzkoa con 249,10 gramos de media al día por persona. Zarautz tampoco se queda muy lejos con 241,21. Y ambas quedan por delante de Usurbil, que con su método de recogida puerta a puerta alcanza 191,48 gramos por persona y día. El resto de poblaciones les siguen con cifras muy aproximadas y con tendencia al alza: Azkoitia 184,92; Zumaia 183,12; Amara 179,28 y Aretxabaleta con 169,46.

Oposición

Ambos métodos de recogida cuentan con opositores. En el caso del quinto contenedor, el sistema se considera insuficiente por ANV, EB y por las plataformas ciudadanas que se oponen a la construcción de la incineradora de Zubieta. Estas últimas son partidarias de extender el modelo puerta a puerta a toda Gipuzkoa, ya que consideran que la experiencia de Usurbil ha sido un éxito.

Esta no es la opinión, sin embargo, de parte de los vecinos de la localidad citada. Un grupo de usurbildarras ha creado una plataforma entre cuyas peticiones se encuentra la realización de una consulta popular. Estos vecinos reclaman que en Usurbil se instale el quinto contenedor, al estimar que el sistema puerta a puerta es insalubre e incómodo. La plataforma ha recogido cerca de 800 firmas en favor de sus postulados.

La Diputación mantiene una actitud de no intromisión. Señala que cada Mancomunidad es competente para establecer el sistema que considere apropiado.

La Diputación lideró el proceso de elaboración del Plan de Residuos de Gipuzkoa, aprobado por todas las Mancomunidades, incluida San Marcos. Establece la potenciación del reciclaje y de la recogida selectiva, destinando a la incineración la fracción restante, aproximadamente el 50%.

La institución foral estima que las mancomunidades son muy libres de sumarse a este plan o desarrollar uno alternativo y llevarlo a la práctica.