El Arrate tratará de sorprender de nuevo al Granollers

DV. Reconciliarse con la victoria. Esa es la consigna bajo la que la expedición eibartarra se subió al autobús con destino a Granollers con el fin de dar buena cuenta esta noche (20.45 horas) de una escuadra vallesana que, en líneas generales, se le da bastante bien.

El contratiempo más significativo con el que se encuentra Julián Ruiz de cara a la disputa de la séptima jornada es la ausencia del zurdo István Rédei.

El húngaro se ha quedado en Eibar aquejado de la inflamación que padece en la zona genital, como consecuencia del fuerte golpe que le propinó el francés Didier Dinart en el encuentro contra el Ciudad Real. El cuerpo médico del club ha decidido que se mantenga en reposo.

Cubrir su baja no va a resultar tarea sencilla, dado que se trata del único zurdo con que cuenta en la primera línea el técnico cántabro. Una opción nada descabellada, y que ya se puso en práctica con óptimos resultados durante la pretemporada, es la reconversión del zurdo extremo Berrios en lateral. También es muy probable que esta noche roten por este puesto tanto Harsanyi como el central Marc García, que retorna a su tierra. El pivote Garate volverá a completar la lista de convocados, al igual que lo hizo cuando se lesionó el extremo Arroyo.

El pabellón Olímpico de Granollers es un escenario que ha dado muchas alegrías a lo largo de los últimos años a la afición albiazul. No en vano, ha sido capaz de puntuar en las campañas 2004-2005 (32-32), 2005-2006 (24-25), 2006-2007 (25-27) y 2007-2008 (32-34).

La novedad más importante que presenta el Granollers (penúltimo, con tres puntos) es el debut de su reciente fichaje, el sueco Nicklas Grundsten.