El Arrate sucumbe ante un Reyno de Navarra ordenado

DV. Pese a cuajar buenas actuaciones en Pamplona, al Arrate le suele costar coger desprevenido al Reyno de Navarra y lamentablemente para sus intereses ayer no fue ninguna excepción. Después de ofrecer durante muchos minutos una buena imagen, acabó por sucumbir y ceder ante la superioridad de un conjunto navarro que se mostró más ordenado.

El equilibrio de fuerzas se prolongó hasta el primer cuarto de hora. El conjunto antoniano llevó siempre la iniciativa en el marcador con la excepción del parcial 5-6. Las primeras pérdidas de balón le llevaron a ponerse a remolque y a dejar cuesta arriba el partido para el descanso, al que llegó cuatro goles abajo (19-15).

En la reanudación, el Reyno de Navarra se limitó a conservar las diferencias. En ningún momento se vio ningún atisbo de que el Arrate fuera capaz de dar la vuelta a una contienda que el San Antonio pudo controlar sin excesivos apuros.

Las pérdidas de balón volvieron a condicionar su rendimiento, al igual que la brillante actuación del meta Besirevic y las precipitaciones.

Los contragolpes acabaron por desestabilizar y desarmar a un conjunto eibartarra que se fue desinflando paulatinamente hasta encajar una abultada derrota que puede resultar un tanto engañoso.

La cruzada contra los grandes de la Liga Asobal para el Arrate no termina aquí, dado que tras medirse con el León y viajar a Pamplona el 27 de noviembre (viernes) le corresponderá rendir visita en Ipurua a todo un Barcelona. El colchón de puntos logrado en el arranque liguero le permite afrontar sin excesivos apuros estos duelos.