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MARIAN GONZALEZ
Domingo, 19 de octubre 2014, 00:23
Los once equipos federados que componen el fútbol base del Aloña, y la escuela de fútbol, compartieron ayer sesión fotográfica en Azkoagain. «Son más 300 jugadores en los diferentes equipos y verlos a todos juntos, mayores y pequeños, es una satisfacción porque se puede ver el presente y, sobre todo, el futuro del club», explicó el presidente Jabi Azpiazu, tras posar con ellos.
Recalcó que el fútbol es para divertirse, y que se llegue o no se llegue al primer equipo, lo importante es ser felices compitiendo y tener ilusión por entrenar y jugar.
Jabi quiso agradecer también «el trabajo de todas las personas que colaboran para que el Aloña siga adelante, porque cada vez es más difícil encontrar entrenadores, delegados y colaboradores». Y en esta línea abrió las puertas a todos los que quieran echar una mano.
Se mostró muy orgulloso del trabajo con la nutrida cantera y valoró positivamente el uso de Larraña, que el club está utilizando ya para algunos entrenamientos.
Lo cierto es que la realización de la foto 'oficial' de todos los equipos, convirtió Azkoagain en una hervidero de gente. Más de 350 personas, entre integrantes de las 11 escuadras federadas que tiene el Aloña, sus cuadros técnicos, y la Futbol Eskola, se vistieron de corto y pusieron la mejor de las sonrisas con la complicidad de un sol de justicia, que complicó bastante la sesión fotográfica.
El Aloña realiza un trabajo muy serio con la cantera. Doscientos jovencitos y jovencitas se entrenan a las órdenes de los técnicos que dirigen las once formaciones, que constituyen el fútbol base del conjunto rojillo. Hay tres conjuntos femeninos (infantil, cadete y juvenil) y 8 masculinos (alevín, infantil txiki, infantil de honor, cadete de primera, cadete de honor, juvenil de primera, juvenil de honor y regional de Honor).
Si a esta cifra sumamos los 125 escolares del Futbol Eskola ( 51 de tercero de primaria, 38 en cuarto y 36 en quinto ), la baraja de ilusiones es espectacular, y el trabajo que realiza la directiva y la estructura técnica del Aloña (más de 40 personas entre entrenadores, auxiliares y delegados) digna de elogio.
Queda una larga temporada por delante, en la que aprender, disfrutar y también sufrir compitiendo. Además de vivir el fútbol , como un poso de ilusiones, amigos, experiencias y aprendizajes, sobre todo para los más 'txikis'.
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