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IÑAKI IZQUIERDO
SAN SEBASTIÁN.
Miércoles, 8 de noviembre 2017, 07:38
Jokin Etxabe (23 años) no continuará el año que viene en su actual equipo, el Aevolo, un Continental estadounidense. Los responsables del equipo destacaron el papel del ciclista de Bergara cuando comunicaron su baja, pero se trata de un equipo de formación compuesto por ciclistas sub 23, motivo por el que el guipuzcoano se ha quedado sin sitio. Sin embargo, el Aevolo está intentando echarle una mano para encontrar acomodo en el pelotón.
«Está muy difícil», reconoce Etxabe, «pero mi objetivo es continuar. A finales de agosto en el Aevolo me comentaron que no podría seguir el año próximo porque son un equipo de formación con corredores sub 23, y que por edad me quedaba fuera. Sin embargo, me dijeron que estaban muy contentos con el trabajo que había realizado, que me habían visto detalles buenos y que me iban a ayudar a encontrar nuevo equipo».
De momento no tiene noticias. «He corrido el calendario americano y tres equipos Continentales de allí han desaparecido, con lo que hay mucha gente que se ha quedado fuera. Hay entre 30 y 40 corredores de Estados Unidos que se han quedado sin equipo. En este momento, como es lógico, primero se está colocando la gente de allí y luego se empezarán a mover para fichar extranjeros. Tocará esperar hasta el final».
Jokin Etxabe es consciente de que en 2018 no correrá en un equipo vasco, y le apena. «Ahora que parece que ha salido la luz en Euskadi no voy a tener sitio. Me da pena que después de salir fuera para crecer, para aprender y adquirir una buena experiencia como ciclista, sacrificándote para ir fuera y vivir en el extranjero, cuando en casa surgen proyectos no hay sitio para la gente de casa».
Nació en Bergara el 3 de febrero de 1994 Tiene 23 años.
En aficionados corrió en el Debabarrena (2013-2014) y el Seguros Bilbao (2015-2016).
En profesionales Aevolo (2017).
Esta temporada Tiene cinco top 15, entre ellos el 11º en una etapa del Tour de Beauce (Canadá), el 14º en una etapa del Tour de Gila (EEUU) y el 15º en el GP Sagenay (Canadá).
El bergararra lamenta que «se estén formando ciclistas en Euskadi y no son vascos. Ves que se habla de formar una selección de Euskal Herria y que se hace con corredores que no son vascos, pero no hay que darle más vueltas. Yo, por mi parte, voy a poner todo lo que está en mi mano para seguir corriendo. Tengo 23 años, no me considero mayor».
Jokin Etxabe habla con pasión. «Quiero ser ciclista». En la sencillez está la verdad de esa frase. Ser ciclista. Algo grande.
Cree que puede serlo, porque su primer año en profesionales ha sido bueno, aunque la distancia hace que su temporada no haya tenido toda la valoración que merecería. «Los equipos de aquí me dicen que no tengo números. Pero tengo cinco puestos en el top 15, tres de ellos parando a esperar a un compañero. A lo mejor tenía que haber sido más egoísta, pero para mí las órdenes que llegan del coche son sagradas. Si te dicen que hay que parar, se para. Ni se me ocurre pensar en comportarme de otra manera».
Hay que tener en cuenta, además, que el calendario americano no se ajusta demasiado bien a las características de un escalador como Jokin Etxabe. «En toda la temporada, como mucho habremos corrido diez días carreras con montaña. Es ahí donde he conseguido los puestos, no en días intrascendentes metiéndote en alguna llegada. Además, en la última parte de la temporada el equipo perdió las invitaciones para el Tour de Utah y el de California, que eran carreras que a mí me podrían haber venido mejor. El equipo me ha transmitido que están contento conmigo y que están mirando a ver si sale algo para mí».
Etxabe ya se está entrenando pensado en la próxima temporada. «Estoy centrado. Hasta el 1 de enero voy a hacer bien las cosas y entonces, si no ha salido nada, pensar en qué hacer, si dejar la bici o no». Palabras duras de pronunciar para alguien que solo un instante antes ha dicho las otras: «¡Quiero ser ciclista!».
Pero el bergararra sabe cómo funciona el negocio. «El año pasado firmé el 6 de diciembre, también tarde, aunque entonces ya habíamos empezado a hablar un poco antes».
Jokin Etxabe ha vivido este año en Milwaukee, a orillas del lago Michigan y cerca de Chicago. La inmensidad de Estados Unidos le ha obligado a viajar mucho, pero también le ha permitido conocer un mundo diferente y otra cultura. Las Vegas, Malibú, Colorado Springs, Canadá... «Se viaja mucho en avión. Muchas veces te agota, porque son verdaderas palizas pero no queda otra. La organización diaria cambia bastante respecto a lo que conocemos aquí. La verdad es que hemos estado muy bien cuidados y no nos faltaba de nada, ni en carrera ni tampoco en las concentraciones. Me entrenaba mucho por los alrededores del lago Michigan».
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