El ahorro también aumenta y llega a los 123 millones

Los ayuntamientos de Gipuzkoa no se quieren volver a encontrar ante otra eventual complicación sin un colchón financiero del que poder tirar. En 2007, año previo al inicio de la crisis en Euskadi, los consistorios del territorio disponían de una ahorro neto -la parte del ahorro bruto que queda después de hacer frente al pago de las cargas financieras- de 130 millones de euros. Dos años después, la cuantía se había esfumado y apenas figuraban 34.212 euros en esas cuentas. Fruto de la experiencia, las instituciones han aprendido que deben hacer acopio de todos los recursos posibles cuando la economía remonta y así lo han entendido también las entidades locales de Gipuzkoa que llevan dos ejercicios dando lustre a esa reserva, de forma que a cierre de 2015 la cuantía total que se reflejaba como ahorro neto se situaba en los 123,3 millones de euros, cerca de los niveles previos a la crisis y un 17% más que el curso previo.

La cifra muestra, a su vez, que los ayuntamientos siguen guardando cautela a la hora de invertir, situación que se observa también en la solicitud de préstamos para inversiones a entidades de crédito, que en 2015 descendió hasta los 25 millones de euros, lejos de los 60 millones de 2008 o los 80 de 2009.