Los baserritarras escindidos de EHNE defienden un modelo de agricultura sostenible y una nueva estructura para toda Euskal Herria

Un grupo de unos cuarenta baserritarras ex afiliados a EHNE han decidido abandonar el sindicato tras mostrarse disconformes con la trayectoria seguida por los actuales dirigentes en los dos últimos años y ante la falta de absoluta, señalan, de de condiciones democráticas para poder defender y desarrollar su opción sindical agraria. Según han señalado esta mañana en una rueda de prensa en San Sebastián, han optado por ir dando pasos hacia un nuevo proyecto.

La que fuera presidenta de EHNE, Marije Intxausti, ha señalado que hace tres años comenzó el último debate conflictivo sobre la agricultura y organización sindical en EHNE Gipuzkoa, aunque las diferencias vienen de atrás, por lo que no puede achacarse a la llegada a la Diputación de EH Bildu. Ha añadido que tras la dismisión presentada por siete de los once miembros de la dirección, el sindicato ha venido actuando de" manera irregular hurtando la posibilidad de desarrollar un debate interno y aplazando la convocatoria de un congreso", tal y como solicitaban los críticos con la actual dirección.

Ha explicado que ahora, de un día para otro y sin el más mínimo esfuerzo para tratar de buscar un consenso se ha realizado una convocatoria "irregular". Un congreso, que tendrá lugar mañana en Tolosa y que para este grupo no es sino una "asamblea, en la que se trata de decidir en una mañana la línea política sindical y elegir la nueva dirección".

El grupo escindido defiende un modelo de agricultura sostenible y cercano que garantice el futuro de una agricultura y ganadería en Euskal Heria, en el que tengan cabida el máximo posible de baserritarras. Niegan que se trate únicamente de agricultores ecologistas, una etiqueta que dicen quieren ponerles, cuando no es así.

Aboga por una nueva estructura para toda Euskal Herria que supere los actuales provincialismos. Aunque no hay querido detallar más, porque señalan que a partir de ahora se iniciará un proceso de reflexión en el que se deberán consensuar y acordar las fórmulas que se van a adoptar. Consideran que el proyecto es "ilusionante" y que se van sin el objetivo de "torpedear a la dirección actual". "Quizás nos volvamos a encontrar en el camino", ha subrayado Marije Intxausti, que ha comparecido junto con unos quince baserritarras.