Regresa el ambiente invernal y el riesgo de nevadas a 700 metros

Euskadi vuelve a estar de nuevo en alerta, en esta ocasión por nevadas. El Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco activará hoy y mañana el nivel amarillo por riesgo de precipitaciones en forma de nieve a 800 metros de altitud. Mañana, es probable que la nieve descienda a 700 metros.

La lluvia, según el pronóstico de Euskalmet, podría conceder hoy una pequeña tregua en las horas centrales, «para volver con renovadas fuerzas a partir de la tarde, incluso con tormentas al final del día», señalan desde la agencia vasca.

El aviso por nieve entrará en vigor a las 21.00 horas y se mantendrá hasta las doce de la noche. Al inicio de este episodio, la cota se situará en torno a 1.200 metros, aunque, según discurran las horas, irá descendiendo y se prevé que a última hora del día baje hasta los 800 ó 900 metros. Se espera que el espesor pueda llegar hasta los tres centímetros a 1.000 metros.

Las precipitaciones serán débiles, aunque no se descarta que de manera ocasional pueda descargar de forma moderada.

Las temperaturas alcanzarán valores máximos similares a los de jornadas precedentes. No obstante, a partir de la tarde refrescará de forma notable debido a la irrupción del viento del noroeste.

Mañana, el aviso amarillo estará activo hasta las seis de la tarde. La cota de nieve podría bajar a los setecientos u ochocientos metros e incluso más en áreas en las que se desaten tormentas. Se podrían acumular hasta siete centímetros de nieve a mil metros de altitud y uno a seiscientos.

Para mañana, de acuerdo al pronóstico de la agencia vasca, se espera un «ambiente invernal, con inestabilidad, frío y viento intenso». Los chubascos afectarán sobre todo a la vertiente cantábrica, donde incluso podrán descargar acompañados de tormenta.

No obstante, se espera que esta situación empiece a remitir a partir de la tarde. «En el centro y sur de Navarra prácticamente no lloverá, en cambio el cierzo soplará inclemente», señalan desde Aemet. Las temperaturas serán frías, con máximas que en el interior rondarán los 5 grados y con heladas en zonas de montaña.

Deshielo

La Dirección de Atención de Emergencias y Meteorología dio ayer por desactivado los dos avisos que estaban vigentes por riesgo marítimo costero y precipitaciones persistentes en Bizkaia y Gipuzkoa.

Las lluvias de las últimas horas fueron desiguales. En el observatorio de Igeldo, dentro de la red Aemet, se midieron 8,1 litros por metro cuadrado, mientras que en el del aeropuerto de Hondarribia se recogieron 5,2. En Bizkaia llovió con ganas. En el aeropuerto de Loiu cayeron 21,8 litros y en el del Foronda, en Vitoria, 4,2 litros.

Las precipitaciones aceleraron el deshielo que ya se había iniciado días atrás con la subida de las temperaturas. La cantidad de nieve que todavía se acumula en los montes, donde en algunas zonas había más de un metro, empezó a fundirse al contacto con la lluvia. Esta circunstancia hizo que el nivel de los ríos fuera en aumento de manera paulatina.

En Gipuzkoa, la situación estuvo en todo momento bajo control y no hubo mayores complicaciones. Bidasoa, Urumea, Oria, Urola, y Deba bajaban con un caudal considerable, pero se mantuvieron muy lejos de los niveles a los que llegaron hace dos semanas. El río Ego, a su paso por Eibar, superó ligeramente el nivel amarillo, al que, sin embargo, retornó al cabo de un tiempo. Lo mismo le sucedió al Arratia a su paso por el municipio vizcaíno de Zeanuri.

En la cuenca del Zadorra, el río alcanzó también el nivel amarillo. Debido a las crecidas, varias carreteras de la red secundaria de Álava quedaron cerradas al tráfico. En concreto, se cortó la A-3322, entre Lapuebla de Arganzón y Tuyo, y la A-4356, en Kuartango, mientras que otras carreteras, como la A-4302 en Iruña de Oca y la A-2122 en la zona de Lantarón, se procedió a cortar un carril y registraron balsas de agua.