Ese gran laboratorio con 700 voluntarios que es Deba

Deba es el gran laboratorio de Cita Alzhéimer. La localidad guipuzcoana fue elegida por su número de habitantes como el lugar en el que obtener resultados epidemiológicos sobre la incidencia que puede tener este mal en una población de algo más de mil personas mayores de 65 años. Casi 700 personas han pasado por la primera fase para detectar cualquier anomalía vinculada con la enfermedad.

Todas las fuerzas vivas de Deba y su comarca se han volcado y los voluntarios han ido casa por casa, caserío por caserío, para explicar a las personas en qué consiste la prueba y qué beneficios puede suponer para la comunidad.

El boca a oreja de los primeros que se apuntaron a estos análisis también ha sido importante para que ya haya 700 personas que han pasado el primer cribado. Esta fase consiste en dos pruebas de memoria con un breve cuestionario y una charla de cinco minutos.

Pablo Martínez Lagé es consciente del esfuerzo que están haciendo los voluntarios para llegar al objetivo, que serían mil personas. «Lo que sí queremos aclarar es que son necesarios todos los datos que cada vecino de Deba nos quiera aportar». La segunda fase consiste en unos análisis de sangre que se hacen en el propio ambulatorio y la tercera, a la que la gente suele ser más reacia, la punción lumbar y la resonancia magnética.

«Lo que nos importa es contar con todos los datos posibles. Si se llega hasta el final mucho mejor, pero no es obligatorio. Otra duda que queremos aclarar es que las personas que ya están diagnosticadas también pueden participar en este ensayo, en este experimento que, además, tiene mucho que ver con que hayamos conseguido entrar en el proyecto europeo EPAD».