El Ayuntamiento retiró ayer buena parte de las bolsas de basura de la calle

Operarios del departamento de Servicios del Ayuntamiento de Pasaia retiraron ayer buena parte de las bolsas de basura que se acumulaban desde hace algunos días en diferentes distritos del municipio. Fuentes municipales aseguraron a DV que las tareas se completarán a lo largo de la jornada de hoy, jueves, ya que fue imposible retirar todos los residuos en un solo día.

Los pasaitarras mostraban su satisfacción por no tener que pasar ante las bolsas que, además de haber comenzado a producir olores, en algunos casos dificultan el tránsito por las aceras. Había quien se felicitaba, aunque alertaba del peligro que supone dejar la basura en determinados lugares, como la que, al parecer, obstaculizaba la salida de emergencia del edificio de la Azoka.

«No todos los que estamos en contra del puerta a puerta dejamos bolsas tiradas en la calle. Si todos los pasaitarras estamos obligados a cumplir con el sistema, a los que se han hecho insumisos deberían de multarles y así se acabaría enseguida con el problema», comentaba un joven anoche en la calle Azkuene de Trintxerpe.

Otro vecino de más edad rebatía sus argumentos, señalando que «hay que seguir con la desobediencia civil hasta que Bildu quite el puerta a puerta; es la única manera de que nos hagan caso». «Esta misma noche volveré a dejar la basura donde estaban los contenedores y así, hasta que nos los devuelvan», añadía.

El Gobierno municipal había anunciado 24 horas antes que estaba prevista la retirada de todas las bolsas de basura que los vecinos depositan en la vía pública a modo de protesta contra el PaP esta misma semana. Recordaba, además, que ese trabajo obliga a los empleados del Consistorio a cambiar su planing laboral, dejando de desempeñar otros cometidos o aplazándolos. «Los pasaitarras deben de saber que esa manera de protestar se paga a escote entre todos», declaraba.

Castigar en las urnas

El portavoz del Partido Popular en Pasaia, David Hernández, respondía las críticas realizadas por Bildu, diciendo que «nosotros no tenemos nada que demostrar. Siempre hemos pedido el respeto a la ley. Los que respetan sólo las leyes que les interesan y apoyan determinados movimientos de desobediencia civil son los representantes de EH Bildu». A su juicio, la única manera de acabar con el PaP es «convencer» a los pasaitarras para que «castiguen» en las urnas la «nefasta» gestión del Gobierno, «que parece haberse tomado a broma las constantes reclamaciones contra la imposición del PaP».

«En repetidas ocasiones se les ha pedido que rectificaran. Incluso se les ha demandado que abrieran verdaderos cauces de participación ciudadana», aseguraba y añadía que «Bildu siempre ha hecho oídos sordos».