El líder Elda sacó partido a los despistes del Akaba

SAN SEBASTIÁN. DV. El líder Elda salió refortalecido tras su paso por el polideportivo de Bidebieta, tras anotarse con grandes dificultades su duodécima victoria consecutiva en la Superliga.

Las donostiarras no se dejaron intimidar por la trayectoria con que recalaba su rival procedente de Dinamarca, donde encajó ante el Viborg su su tercera derrota en la liguilla de la Liga de Campeones.

En Donostia se encontraron con una seria oposición, hasta el extremo de que vieron peligrar su esperada victoria. El único momento en que el Akaba tomó la iniciativa en el marcador fue en el 1-0 anotado por Kowalska. A partir de aquí su tarea fue la de protagonizar memorables remontadas, que a la postre resultaron baldías.

El primer desequilibrio en el electrónico se produjo a raíz de dos jugadas conscutivas convertidas desde la posición de pivote por Box y desde los nueve metros por Fraile en situación de inferioridad numérica. Un lance que en la segunda parte tendría unas consecuencias más dramáticas al llegar a encajar un parcial de 0-4 con una jugadora menos de campo, lo que le valió para abrir una renta de cuatro goles (14-18) que supo administrar muy bien.

La situación más delicada para las de casa se produjo en el minuto 24 cuando Box estableció la máxima ventaja del partido (5-11). El panorama era muy desalentador, con el agravante de la excelente actuación de Tienstra bajo los palos, ya que de lo contrario las diferencias hubieran sido mucho más amplias.

Cuando nadie se lo podía esperar, se produjo el pequeño milagro del Akaba, con la colaboración de la recuperada Larrategi, al anotar en los seis minutos que quedaban para el descanso un parcial de 6-1, lo que le volvía a meter de lleno en el partido (11-12). A los cinco minutos de la reanudación después de que se intercamabiaran cinco lanzamientos cada equipo llegó el segundo y último empate del partido.

Después de haber hecho lo más difícil, volvió a caer en el pozo cuando se encontraba en superioridad numérica. Otro factor determinante fue la brillante actuación de Elejaga bajo los palos. La meta vizcaína del Elda cerró su particular estadística con veintiún paradas.