El Bidasoa-Irun juega en Ciudad Real pero piensa ya en el Antequera

IRUN. DV. El Bidasoa-Irun no quiere ser invitado de piedra en el primer partido que el Ciudad Real va a disputar esta temporada ante su público (20.30 horas) pero tampoco es probable que queme todas sus naves en el encuentro ante los manchegos, sabiendo que el sábado vuelve a jugar en Artaleku, contra el Antequera, y que va a llegar a esa cuarta jornada con sólo un punto en el casillero, a menos que hoy haga saltar la banca en el Quijote Arena.

Al Bidasoa-Irun to-davía le repite el veneno que ingirió el sábado en Artaleku, donde el Ciudad de Logroño se impuso por 29-31. Resulta complicado de-terminar si aquel día afectó más la ausencia del portero Ole Erevik o la del lateral izquierdo Dawid Nilsson, uno de sus grandes artilleros. Ivan Stankovic no pudo con los riojanos, que hicieron valer su experiencia para imprimir el ritmo que les convenía y ver cómo brillaba el extremo Tvedten (14 goles). Mientras el Darien Logroño es el quinto equipo más veterano de la Asobal (media de 27'5 años, siete hombres por encima de los 30), el Bidasoa-Irun es el más bisoño (23 años de promedio y los dos ausente son los dos mayores).

Pero no hay tiempo para lamentos. El ritmo de la Asobal en el arranque no permite ni un respiro para corregir los errores. Más que a modo de inventario, la visita al Ciudad Real debe tomarse como un test con el que preparar el verdadero partido clave de la semana, el del sábado en Artaleku ante el Antequera. El caprichoso bombo hizo que los dos ascendidos fueran los primeros visitantes de la morada amarilla y para que la derrota ante el Logroño no resulte tan dramática, los irundarras saben que el sábado deben ganar.