Borrar
José Antonio Santano, alcalde de Irun, y Xabier Iridoy, portavoz del PNV y concejal de Urbanismo cesado. DE LA HERA
El PSE lleva al límite el acuerdo de gobierno con el PNV en Irun al cesar al concejal de Urbanismo

El PSE lleva al límite el acuerdo de gobierno con el PNV en Irun al cesar al concejal de Urbanismo

El alcalde, José Antonio Santano, alega «falta de confianza en su gestión» y asegura que no pretende romper el pacto con los jeltzales

iñigo morondo

Irun

Martes, 23 de enero 2018, 17:53

La crisis entre el PSE y el PNV en el Ayuntamiento de Irun ha llegado al punto de que el alcalde, José Antonio Santano, ha decidido este martes cesar al concejal de Urbanismo y portavoz del grupo jeltzale en la localidad fronteriza, Xabier Iridoy. El motivo son las desavenencias surgidas a raíz de una operación urbanística en el centro de la localidad (la zona degradada de Korrokoitz), que ha llevado a un cruce de declaraciones y desautorizaciones en los últimos días que han concluido con el cese de Iridoy.

Está por ver si esta decisión de ámbito municipal tiene incidencia en la relación PNV-PSE a nivel de la Comunidad Autónoma Vasca, donde ambas formaciones gobiernan en las principales instituciones (Gobierno Vasco, diputaciones y ayuntamientos de las tres capitales vascas, estre otros municipios).

Santano ha comparecido esta tarde en el Ayuntamiento acompañado de los otros seis miembros del Partido Socialista en el Gobierno municipal. El primer edil ha defendido que se trata de una decisión "muy meditada y reflexionada junto a todo mi equipo” y que está directamente relacionada con los “acontecimientos que han sucedido durante los últimos doce días”.

Después de que Iridoy anunciara un acuerdo en materia urbanística para un ámbito que lleva décadas a la espera de desarrollo residencial, el Partido Socialista negó que existiera tal acuerdo porque no había informes técnicos, solo la propuesta que presentaron los promotores privados. Según Santano, a preguntas de la oposición y de otros miembros del Gobierno local, en una Comisión de Urbanismo, “no pudo explicar el contenido del acuerdo”, lo calificó de “acuerdo personal” y “aseguró que los informes técnicos lo avalarían”. Esto último, que ha calificado de “urbanismo a la carta” le ha parecido especialmente grave.

Por todo ello, atendiendo a que el “el urbanismo es una materia especialmente delicada” y no puede ser que el “Ayuntamiento de Irun sea criticado por falta de transparencia y de base legal en esta materia”, el alcalde ha confirmado que la confianza en su delegado de Urbanismo, que se había venido “erosionando en los últimos tiempos”, ha llegado a un “punto de no retorno”.

"No se puede permitir que las decisiones en torno a un ámbito con un desarrollo de 300 viviendas de iniciativa privada se tomen con decisiones políticas pensando que luego avalaran los técnicos". "Es el ABC de la transparencia en urbanismo; los acuerdos se toman sobre la base de los informes técnicos", ha reiterado.

A pesar del cese de Iridoy, Santano ha dejado claro que no es su intención “romper el pacto” de gobierno con el PNV, al que hoy mismo quiere solicitar que designe a otra persona para ejercer el cargo de concejal del área de Urbanismo.

Antecedentes

El Partido Socialista de Euskadi y el PNV suscribieron un acuerdo de Gobierno en Irun a comienzos del mandato actual, a finales del mes de julio de 2015, un mes después de los pactos entre PNV y PSE para Donostia y la Diputación Foral de Gipuzkoa. No fue un acuerdo rápido ni fácil entre dos grupos no muy bien avenidos que accedieron a unir fuerzas en aras de la «estabilidad».

25 concejales

  • PSE-EE Cuenta con diez ediles y ostenta la Alcaldía gracias a un Gobierno en coalición con EAJ-PNV.

  • Sí se Puede Irun La plataforma auspiciada por Podemos tiene cinco representantes.

  • EAJ-PNV Tuvo también cinco concejales. Suma mayoría absoluta en coalición con el PSE.

  • EH Bildu La coalición abertzale cuenta con tres corporativos.

  • Partido Popular Obtuvo dos representantes.

Es la palabra tótem de este pacto de gobierno, el mantra recitado en los balances de año, de mitad de mandato o cuando han surgido discrepancias. Porque desde el minuto uno ha sido evidente la tensión entre los miembros de este Gobierno mixto de Irun. Con todo, más allá de la lógica discrepancia entre quienes pertenecen a partidos distintos, la «estabilidad», traducida en una sólida mayoría absoluta en el pleno, ha servido para dotar al municipio de un Gobierno ágil y de unos presupuestos puntuales y estables.

En dos años y medio, la gestión se ha visto salpicada por roces dentro de lo esperable. Los más relevantes, cuando para aprobar mociones por el derecho a decidir y la situación en Cataluña, los jeltzales sumaron votos con EH Bildu y Sí se Puede Irun, (plataforma impulsada por Podemos). Hubo intervenciones duras, pero en los días siguientes se rebajó el tono.

Nada que ver con lo ocurrido en el último mes. En el pleno de Presupuestos del 22 diciembre, los grupos de la oposición, todos ellos, hablaron de un proceso de «negociaciones paralelas»; por un lado, con el delegado de Hacienda, el socialista Miguel Ángel Páez; por otro y sin que el primero lo supiera, con el portavoz jeltzale, Xabier Iridoy, «a instancias del PNV», afirmaron después. Todo salió a la luz durante la sesión y aunque no se llegó a romper ninguno de los acuerdos que esa bicefalia negociadora había alcanzado con cada uno de los grupos, la confianza entre los socios quedó muy tocada.

Hubo varios otros encontronazos los días siguientes, pero el que ha causado las llamas más altas del incendio ha sido Korrokoitz, una degradada zona de la Parte Vieja de Irun pendiente de convertirse en una potente promoción residencial desde hace treinta años.

La coalición lleva dos años y medio gobernando con discrepancias puntuales y roces por temas no locales

ANTECEDENTES

PNV y PSE han ido elevando el tono con motivo del desarrollo urbanístico de un ámbito residencial

ACUERDO SIN INFORMES TÉCNICOS

Iridoy, como concejal de Urbanismo, anunció hace diez días un acuerdo con los propietarios del ámbito. En unas horas, sus socios de gobierno lo desmintieron. Los socialistas argumentaron que lo que hay es una propuesta de modificación del Plan General por parte de los promotores pero que carece de informes técnicos. El tono de las declaraciones cruzadas se fue elevando y, el viernes, el alcalde, el socialista José Antonio Santano, desautorizó con contundencia a su delegado de Urbanismo asegurando que «no habrá nunca un acuerdo urbanístico antes de que informes técnicos que lo avalen». Iridoy contestó sin embozo y acusó a Santano de utilizar «la mentira», de hacer «pura demagogia» y de anteponer «intereses personales y partidistas al desarrollo urbanístico del ámbito Korrokoitz».

En paralelo a este conflicto urbanístico, la edil del PP Muriel Larrea protestó públicamente por considerar que Iridoy no le trataba como al resto de componentes de la Comisión de Urbanismo y se dirigía a ella «con desprecio, altanería y conato de humillación». En este sentido, el alcalde afirmó el viernes que él hubiera llamado a la edil para «aclararlo y, si fuera necesario, disculparse». Palabras por las que el jeltzale le acusó el lunes de «hacer demagogia» al dar por buena una versión «sin hablar con la otra parte. Utilizar esta lacra social como arma política es deplorable».

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariovasco El PSE lleva al límite el acuerdo de gobierno con el PNV en Irun al cesar al concejal de Urbanismo