La aflicción del alcalde japonés de Hiroshima

El alcalde japonés de Hiroshima, Todatoshi Akiba, fue ayer el encargado de abrir la ronda de declaraciones de las delegaciones extranjeras presentes en la Casa de Juntas de la villa foral.

El regente de la ciudad que sufrió el primer bombardeo atómico mundial se mostró muy afectado por el reciente asesinato de su homólogo en Nagasaki, Iccho Itoh, que ayer tenía previsto acudir a Gernika. «Justo antes de partir desde Japón sufrimos un acontecimiento extremadamente espantoso. La vida de Itoh fue arrebatada por las balas de un asesino», expresó el primer edil.

En su declaración, Akiba, visiblemente afligido, apostó por el camino de la reconciliación y apeló al desmantelamiento de las armas nucleares de todos los países, tras recordar las «140.000 vidas que el 6 de agosto de 1945 segó la bomba atómica lanzada sobre mi ciudad».

En este sentido, se mostró solidario ante el bombardeo de Gernika, ya que «ambos compartimos los horrores de la guerra». El primer edil de Hiroshima aprovechó su presencia en la villa foral para hacer extensible un ruego: «Quiero llamar a todas las personas de conciencia de todos los lugares para que unan sus manos y trabajen juntos para que la paz verdadera se haga realidad», declaró.

Asimismo, aunque desde Nagasaki no pudo llegar ningún representante, los participantes en los actos de la Casa de Juntas asistieron a la lectura de un mensaje procedente de la población nipona: «Tienen nuestro pleno apoyo en una día tan significativo como éste, una fecha que obliga a la solidaridad y la reconciliación en todo el mundo», expresó el manifiesto.