BALONMANO / El Bidasoa-Irun juega hoy una nueva final, esta vez en la cancha del Algeciras

IRUN. DV. Día y medio necesitó la expedición del Bidasoa-Irun para alcanzar Algeciras, pues el jueves pernoctó en Jaén y ayer terminó de completar los 1.150 kilómetros que había hasta su destino. Por la tarde, los irundarras entrenaron por última vez antes del partido que hoy, a partir de las siete y media de la tarde, jugarán ante el Algeciras.

En la delicada situación en la que se encuentra el equipo amarillo, es de perogrullo decir que este partido, también éste, es una final para la permanencia. Y lo es porque el Bidasoa-Irun se agarró a esa permanencia ganando el pasado sábado al Teka Cantabria en ese Artaleku que recordó al de las grandes ocasiones. Pase lo que pase hoy en Algeciras, el próximo sábado habrá otra cita ineludible en el polideportivo irundarra, donde jugará el Torrevieja.

Precisamente el Algeciras y el Torrevieja, ambos con 16 puntos, son dos de los equipos a los que el Bidasoa-Irun (12 puntos) puede alcanzar todavía, además de ese Logroño que cuenta con 14 pero que tiene ganado el average particular. Y todo ello tiene que llegar después de sobrepasar al Teka-Cantabria, que cuenta con 13 puntos. Quedan cinco partidos para que termine la competición y los irundarras deberán sacar seis o siete puntos, según sean los resultados en los otros partidos.

Esta tarde, el Algeciras, espera un equipo metido en problemas. Sobre todo, económicos, que incluso desembocaron en una huelga de los jugadores, que estuvieron nueve días sin entrenar porque llevan cinco meses sin cobrar. Aquella huelga finalizó, pero no los problemas de cobros.

El equipo andaluz, en el que milita el pivote irundarra Raúl Bartolomé, completó una gran primera vuelta, con 14 puntos, y jugó la Copa del Rey, pero en la segunda sólo ha conseguido dos puntos en diez partidos.