«Es una satisfacción que los compradores sean jóvenes de la ciudad que apuestan por Txomin»

El alcalde oye el nombre de Txomin Enea y se le dibuja una sonrisa. No es para menos. Poco después de asumir el cargo, ahora hace un año, una sentencia del Tribunal Supremo echaba un jarro de agua helada a la pretensión municipal de adjudicar las obras y auguraba nubarrones para la operación. El gobierno municipal negoció con los propietarios de suelo y desbloqueó el litigio pagando 7,6 millones de euros más de lo previsto. El esfuerzo económico municipal ha sido muy grande (rondará por todos los conceptos los 30 millones de euros, incluyendo expropiaciones, contracanon, construcción del nuevo puente...) y el trabajo técnico y político de aprobación del planeamiento, gestión del suelo y tramitación del expediente a lo largo de varias legislaturas se puede calificar de ingente. Hoy toca descorchar el champán porque además, según explica Goia, el desarrollo de Txomin llega con «la regeneración del río encauzada y con el planeamiento de Antzita en vías de aprobación». De lo que se siente más contento el alcalde es de que la mayor parte de los compradores son jóvenes donostiarras. «Creo que más del 70% tiene este perfil. Esto es una magnífica noticia. Indica que la ciudad puede ofrecer proyectos de vida a precios competitivos para sus nuevas generaciones, que no tienen que irse de Donostia para vivir. Estamos muy ilusionados por lo bien que ha arrancado la operación. Txomin expresa el San Sebastián del futuro, un barrio nuevo, joven, formado por donostiarras y junto a un río que no amenaza sino que es fuente de vida».