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DV
Martes, 13 de abril 2010, 09:46
El equipo de Edurne Pasaban sigue a la espera de una ventana de buen tiempo que le permita iniciar el ataque a la cumbre del Annapurna, que sería su decimotercer ochomil, el penúltimo en la carrera de los catorce.
El parte meteorológico previsto para el día ayer se cumplió y, como anunciaba, soplaron vientos muy fuertes en la cumbre, mientras que al caer la tarde comenzó a nevar.
Sin embargo, hay buenas noticias respecto al tiempo. Se prevé que desde el jueves el viento disminuya su intensidad, y según se anuncia, el sábado podría ser un día adecuado para intentar la cumbre. Para esa jornada se espera que el viento disminuya hasta los 20 kilómetros por hora.
El equipo de 'Al filo...' tomará hoy una decisión definitiva al respecto, «pero seguramente -indicaron- saldremos hacia arriba el miércoles para aprovechar la tregua que ofrece el tiempo».
Mientras tanto, el de ayer fue un día de limpieza en el campo base y de visitas de otras expediciones acampadas en las proximidades. Por su parte, Edurne se encuentra mucho mejor de su catarro, «después de estar casi todo el día en la cama para reponerme».
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