Nisa Goiburu 'atrapa' la naturaleza en el Palacio Aramburu de Tolosa

Nisa Goiburu, nacida en Ordizia y formada como artista por medio mundo, lo tiene claro. «El motor que mueve el corazón de la naturaleza y el corazón de la persona es el mismo: la vida». Y vida, mucha vida, es lo que encuentra el visitante en la exposición que se ofrece hasta final de mes en el Palacio de Aramburu de Tolosa y titulada 'Y aún así, somos naturaleza'.

La muestra se abrió al público hace un mes dentro de las Jornadas Naturaldia de la antigua capital foral. Es un viaje al entorno ecológico desde un punto de vista que Goiburu explica así: «Nada es lo que parece y todo es lo que no parece». La artista utiliza todo tipo de materiales (cristal, gasa, polvo de marmol, telas, cuerdas, alambre...) para recrear un espacio natural en el que invita al público a reflexionar sobre la relación entre el ser humano y el mundo que le rodea.Y el espectador de la muestra termina engullido por una visión especial del planeta contemporáneo. «Tenemos que aprender a ver la naturaleza con otra mirada, a observar los detalles y la belleza de sus formas. Las personas formamos con ella un todo, somos uno», señala Goiburu.

La creadora guipuzcoana invita a pasear entre imágenes de árboles, de troncos, de musgos, de sugerentes collages, incluso permite que el visitante se detenga a observar un enigmático jardín de cristal, que perciba un soplo de aire a través de un alambre circular y hasta se adentre en el interior de un gran árbol para llegar hasta su corazón.

«Es una exposición didáctica, que pretende reflejar lo que se ve y se esconde en el bosque», afirma Goiburu. Versos del naturalista Joaquín Araujo presiden cada área lanzando mensajes críticos en una conjugación de poesía y naturaleza.

Nisa Goiburu, autora de una larga y fecunda trayectoria creativa, considera que esta muestra «es una feliz inmersión en el medio ambiente para el ciudadano de hoy».