En bici desde Herrera a Intxaurrondo

Esta vez es fruto de la colaboración entre el Ayuntamiento y la Diputación y su objetivo es la conexión ciclista de dos barrios, Intxaurrondo y Herrera, a través de un bidegorri de 1.650 metros entre el reloj de Ategorrieta y el barrio de Herrera. Su coste será de 1,5 millones de euros y su elemento más singular, el túnel de Txaparrene, utilizado hasta 1952 por la Compañía del Tranvía y en desuso desde hace muchos años.

El acuerdo de financiación fue firmado ayer por el alcalde Odón Elorza y la diputada de Transportes, Arantza Tapia, en presencia del diputado de Desarrollo Sostenible, Carlos Ormazabal. Para los tres, acompañados también por la responsable de Movilidad, Maravi Dafauce, el avance que supone este nuevo carril bici va a ser muy positivo en la apuesta por los medios de transporte públicos y no contaminantes.

En marzo de 2011

Será la Diputación la que financie esta obra, que saldrá a licitación esta misma semana y que se prevé que esté concluida antes de marzo de 2011. El nuevo carril bici tendrá dos tramos diferenciados. El primero, de 950 metros, entre Ategorrieta y el viejo túnel será acondicionado por el Ayuntamiento a cargo del segundo Fondo Estatal de Inversión Local, con un presupuesto de 35.000 euros que discurrirá por el paseo peatonal paralelo al parque.

El segundo, de 700 metros, es el que utiliza el antiguo trazado de la Compañía del Tranvía, acondicionado a cargo de la Diputación, y más complicado por que debe salvar el túnel y los accesos a la autopista por Herrera y Pasaia.

El túnel se arregla y acondiciona en sus 125 metros de longitud y se construye una pequeña pasarela que sobrevolará los viales. Así, el nuevo bidegorri tiene los 125 metros de túnel, un tramo a cielo abierto de 340 metros, esa pasarela «de impacto mínimo» de 75 metros y 160 metros más hasta llegar a Herrera.

Ayer se explicó que este carril bici, que discurre en llano, contará con una anchura de tres metros, salvo en el tramo final en el que será de 2,5. Será de coexistencia para peatones y ciclistas y lindará con las vías del tren.

Tanto Tapia como Elorza destacaron que el recorrido es en llano en su mayor parte y que salva el alto de Miracruz, con lo que se convierte en una vía ciclista cómoda. Complementado con el que la Diputación ya ha licitado para llegar a Buenavista, servirá para trasladarse en bicicleta desde la zona de Arditurri en Oiartzun hasta el barrio de Añorga. Para Tapia es importante conectar Donostia con su entorno, «porque en el fondo somos todos ciudad, pero parece que vivimos de espaldas».

Elorza habló de sueño cumplido y que se se logra llegar a los 50 kilómetros de carril bici urbano neto, «bien diseñado y protegido». Recordó que de la red central surgirán conexiones en las llamadas áreas 30, en las que convivirán bicis y coches en la calzada.

Estratégico para el PNV

Si entre ambas instituciones ayer todo eran parabienes, el portavoz del PNV, Xabier Ezeizabarrena, se sumó también a la valoración positiva del acuerdo. Y es que, a juicio del edil jeltzale, esta actuación «logrará un importante impulso a la movilidad sostenible entre entornos que tienen gran densidad de población».

Para el PNV, hay razones para calificar este proyecto como estratégico. «Es una apuesta para la conexión en bici, con muy poco desnivel desde Gros hasta la bahía de Pasaia, uniendo el centro de Donostian con Herrera y el puerto en un tiempo, diez minutos, que será competitivo con otros medios de transporte».