El PNV habla de la «guerra sucia» en un plan especial

La caja de los truenos se destapó ayer en el Pleno con un asunto que parecía insustancial. La aprobación definitiva del plan especial que ha permitido ampliar las dependencias institucionales y residenciales del cuartel de la Guardia Civil de Intxaurrondo acabó como el rosario de la aurora. El concejal del PNV Martin Ibabe (guardia municipal en excedencia) dijo que la sede de Intxaurrondo «no es un símbolo de paz, sino de guerra, incluso de la guerra sucia... un signo vergonzante del Estado democrático». La portavoz del PP, Maria José Usandizaga, le interrumpió para decirle que «muchos estamos aquí vivos gracias a la Guardia Civil». Odón Elorza le acusó de «irresponsable», mientras el concejal de Urbanismo, Jorge Letamendía, dijo sentir «ridículo ajeno», y reprochó a Ibabe que, «formando parte de un cuerpo de seguridad, haya tenido una intervención tan rastrera». Urbistondo (PP) le recordó que «no son las instituciones las que cometen delitos sino las personas».