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DV.
Viernes, 5 de agosto 2011, 10:31
El futuro de la JD.Arrate en la máxima categoría del balonmano estatal, es decir, en Asobal, ahora mismo tiene visos de esfumarse. En resumen: que el balonmano profesional en Eibar puede desaparecer, si no se produce un viraje de ciento ochenta grados. La decisión de no conceder una subvención extraordinaria -400.000 euros, necesarios para hacer frente a los 200.000 que exige Asobal para saldar las deudas con exjugadores- por parte de la Diputación ha supuesto un duro revés para las esperanzas del único representante de Euskadi en la máxima categoría del balonmano.
La incertidumbre y la decepción reinaba ayer en miembros de la Junta Gestora que, en un último intento y ante las exigencias del ente foral de presentar una documentación referente al plan de viabilidad, se iban a desplazar a la capital donostiarra para estar con responsables del área deportiva de la Diputación. El panorama es sombrío y ha sido un duro golpe en la línea de flotación de los débiles cimientos sobre los que se sostiene en este momento la entidad albiazul.
Si la decisión de la Diputación es irreversible es muy probable que los miembros de la actual Junta Gestora convoquen una asamblea y se tome una decisión sobre el futuro del club. La Diputación les adelantaría 300.000 euros de la subvención ordinaria por ser club de élite del año 2012, pero que no son suficientes.
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