«Los mimos son buenísimos»

- ¿Los mimos son buenos?

- Los mimos son buenísimos, coger mucho en brazos a tus hijos, contarles muchos cuentos, hacerles muchas cosquillas no hace daño. Pero otra cosa muy distinta es hacer todo lo contrario utilizando la misma palabra, que es pasar olímpicamente de ellos y para quitártelos de encima, toma dinero, toma una consola, vete al cine y haz lo que quieras.... Eso no son mimos, eso es pasar del niño.

- Pero hay quien exagera con los mimos

- Los niños pequeños necesitan un tiempo de atención directa. Estamos hablando de bebés y de hacerles cucú y cosquillitas, pero no necesitan que se las hagan doce horas al día, lo que no quiere decir que el resto del tiempo no tengan necesidad de los padres. Necesitan simplemente que ellos estén allí; no hace falta que les hablen, basta con la presencia de los padres a lo mejor con un libro, charlando o aburridos mirando por la ventana. Pero ese niño de pronto hace un gesto o un ruido, su padre le mira y el pequeño se queda contentísimo. Más adelante el niño hará construcciones, te vendrá cada media hora para enseñarte lo que ha hecho y tú solo le tendrás que decir 'qué bonito', no hace falta que juegues con él, pero necesita a alguien que esté ahí para decir 'qué bonito'.