Un ruso entre Elgoibar e Irun

¿Cómo te describirías como jugador? «veterano», contestó sonriendo Viatcheslav Kobin en su presentación como jugador del Bidasoa-Irun, que tuvo lugar en el Hotel Atalaia. El lateral, que cumplirá 38 años el día 10 del mes que viene, estaba pensando en la retirada, pero ayudará esta temporada al equipo entrenado por Fernando Herrero a conseguir la permanencia. Aunque el ruso ya dejó claro ayer que «podemos luchar por estar más arriba, incluso por alcanzar los puestos de play-off».

No es fácil pensar que el Bidasoa-Irun esté para cotas tan ambiciosas, pero si lo dice Kobin será por algo. Sus compañeros más jóvenes están alucinando con él en los entrenamientos. «Se las sabe todas», apuntan uno y otro. Y es que además de kilos y altura para la defensa y una potente zurda para el ataque, el ruso va a ser un buen profesor para la bisoña plantilla bidasotarra.

Y es que Slava, como le gusta que le llamen, lleva toda la vida jugando a balonmano. «He jugado veinticinco años como profesional y aportaré la experiencia que le falta al equipo», significó en su puesta de largo.

De su amplia trayectoria hay que destacar las seis temporadas que militó en la Sociedad Deportiva Arrate. Mucho lo debió gustar Gipuzkoa y el entorno eibarrés, ya que tiene su residencia actual en Elgoibar, donde vive con su mujer. Kobin jugó el año pasado en el Adelma Sinfín de Santander, pero tras su periplo en tierras cántabras volvió a ser un elgoibartarra más.

Allí ha estado entrenando durante el verano y en estos primeros meses de competición, en los que ha estado sin equipo. Aun así, se ha ejercitado con el Elgoibar, de Segunda Nacional.

Su fichaje con el Bidasoa-Irun se cerró la semana pasada, pero el tiene claro que no se mueve de Elgoibar. Seguirá viviendo allí y cada tarde se desplazará en coche hasta Irun para entrenar a las órdenes de Fernando Herrero.

Debutó en Pozoblanco

Aunque la presentación fue ayer por la mañana, Kobin debutó el sábado en Pozoblanco. El lateral se ha convertido desde el primer día en un jugador importante y aportó en defensa y ataque. El nuevo jugador bidasotarra marcó cinco goles.

Kobin aseguró que «estoy encantado de poder jugar en el Bidasoa. Pensé en la retirada, pero me llegó la oferta del club y estoy muy contento. No me ha costado adaptarme al equipo, aunque todavía tengo que ponerme en forma».