Borrar
Caja de vasquitos y perchas. Miguel en su mesa de trabajo. :: G. RIVAS
«La Arquitectura me da la técnica para construir mi Arte»
SAN SEBASTIÁN

«La Arquitectura me da la técnica para construir mi Arte»

Miguel Balliache El artista en su loft con su Mazinger, su hierro y su título

PPLL

Miércoles, 30 de noviembre 2011, 08:30

Reconózcase y téngase en toda la República al ciudadano Miguel Balliache Ruiz como tal (Arquitecto)'. Así reza (en parte) el hermoso, orlado y apasionado título otorgado en 1998 por la Universidad de Venezuela al artista plástico que firma su obra con su apellido primero, regresó a esta su tierra con el III Milenio y encuentra en la basura tesoros e inspiración. Vive y crea en el Paseo de Zubiaurre. Trabaja ahora en el Costa Vasca.

- ¿Por qué no hiciste Bellas Artes?

- No me pesa. En absoluto. A veces sí pienso que debería pasar por esa carrera pero ¿sabes? En Arquitectura te enseñan a resolver problemas y las técnicas indispensables para producir y construir.Gracias a esa licenciatura controlo las herramientas, el espacio, el universo micro y el macro. Sé y conozco pesos, medidas, equilibrios y recuerdo la reacción del óxido. En Miami aprendí las técnicas de la pintura, de la escultura. Y de mi abuela, que cosía pelucas para Balenciaga, la pasión por los hilos y los botones. Mi abuelo fue pastelero y a mí me encanta la cocina... Al final, eres el resultado de lo que los tuyos fueron y son (Zumeta es familia), de lo que estudiaste, de tus vivencias, de lo que te gusta y de lo que no.

- ... De lo que encuentras en la basura: ¡Tesoros!

- Me encanta ofrecer a los materiales desechados vidas nuevas. Convertir materias muy duras, fuertes y tremendas como el hierro en puros dibujos que se mantienen en el aire. Varillas oxidadas transformadas en corazones. No pierden fuerza masculina pero ganan un toque de obra casi femenina.

- Reciclas desechos para crear pero también para vivir.

- Me siento bien rodeado de cosas que han vivido su propia historia. Objetos manchados de experiencia. Este bajo en el que vivo y construyo mi obra es una mezcla total, independiente y republicana de Ikea, Traperos de Emaús y recorrido por las basuras de Donosti. Me pierden los basureros. Paso por ejemplo por ese grandísimo desgüace que hay en Pasajes, con sus grúas gigantescas y sus montañas de chatarra y me obsesiono al pensar que van a fundir un material en el que acaso yo encontraría mi obra. Voy a Traperos y me encuentro orlas magníficas de la facultad de Medicina de Zaragoza, del año 63...

- Y la plantas en el baño.

- Junto a Mazinger. ¿Y has visto esta Heidi? ¡La auténtica! Por un euro.

- ¿Y ese Kennedy retratado con las letras x y w de una vieja máquina de escribir?

- Pues otro euro. Y en Traperos.

- La foto de tu madre de niña será tesoro familiar, supongo.

- Claro. Como esa caja de bombones de Goya, la casa de Vitoria.

- ¡ Guau, cómo ha cambiado el diseño, qué estilizados están los dibujos de los vasquitos de la tapa!

- Me hicieron una ilusión... Me los regalaron un cumpleaños en el hotel donde estuve trabajando. Allí también fue empleado mi abuelo.

- No diremos el nombre del lugar porque vamos a hablar de sus fieles fantasmas. ¿Los vistes?

- Digamos que los he... conocido. El espíritu de aquella desgraciada criada que, cuentan, bebió lejía.

- Me gusta eso de que aparte de las dos nacionalidades, venezolana y española, reconozcas con orgullo que tienes dos crianzas.

- La vasca y la latina. Sueño con hacer una exposición sobre la emigración. Cómo partieron mis abuelos y cómo hemos venido mi hermano y yo trayéndonos a nuestra madre que así ha vuelto a su tierra. Cómo a veces vivimos aquí lo bueno y lo malo que los abuelos conocieron allá por ser eso: emigrantes.

- ¿Qué tal van las cosas en el mundo y el mercado del arte?

- Supongo que los coleccionistas nunca dejarán de tener dinero para comprar pero ¿cómo demonios puedes encontrar a ese coleccionista dispuesto a adquirir tu obra y a abrirte puertas? No es que el mundo del arte esté parado en Donosti: Europa entera está en dique seco.

- Entonces, ¿hay que volver a cruzar el charco?

- Tal vez, no lo sé, ¿cómo?

- ¿Internet acaso?

- Es el gran escaparate para tu obra. Si viajas, viaja contigo. Con solo dar a una tecla enseñas al cliente todo lo que deseas que vea. Pero tienes que tener la web perfectamente cuidada. Y tu tarjeta de presentación debe ser atractiva y clara.

- En la tuya pone 'Artista plástico'. Sin más.

- No iba a escribir los nombres de los artistas que me influyen.

- Nómbralos aquí

- Basquiat, Maplethorpe, Bacon...

- Ecléctico.

- Tanto que en esa obra que se entrevee en la foto yo siento de alguna forma un Bacon suavizado pero alguien intuyó a ¡Hannibal Lecter!

- Como influencia no está mal.

- Para nada. ¿Recuerdas la frase final de 'El silencio de los corderos?

- Ambigua, conociendo sus gustos: 'tengo un amigo para cenar'.

- ¿No crees que el amor tiene un punto gastronómico algo caníbal? Piensa cuando dices: 'Déjame, voy a cocinarte... porque te quiero'.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariovasco «La Arquitectura me da la técnica para construir mi Arte»