«Mi pornografía no busca excitar sino reflejar el impulso animal»

Con una colección de 85 relatos «salvajes y viscerales», en la línea de su anterior obra, el escritor donostiarra Alexander Drake -seudónimo de Alain Gonfaus (San Sebastián, 1974)- se ha llevado el VII Premio Internacional Vivendia-Villiers que convoca Ediciones Irreverentes y a la que han concurrido un total de 246 escritores de 27 países. Autor del libro 'Surfers' y de la novela 'La transformación', Gonfaus vuelve en 'Vorágine' a los temas recurrentes de esta última obra: sexo explícito, violencia gratuita y deshumanización, todo, contado a un ritmo trepidante. No obstante, en esta ocasión ha dejado hueco para algunas pinceladas de romanticismo. El volumen de relatos se publicará el próximo mes de marzo.

-¿Qué es 'Vorágine'?

-Es un libro de relatos que he escrito en los dos años que han pasado desde 'La transformación'. Son relatos que siguen la línea de aquella novela de explorar la violencia, el sexo compulsivo, la crítica social y el aspecto oculto de la naturaleza humana.

-¿Se siente más cómodo en el relato que en la novela?

-Sí porque te da la posibilidad de explorar temáticas independientes entre un cuento y otro, y hacer que la temática sea más abierta, rica en contenidos y personajes y variada. Por su inmediatez y por la libertad que te da, creo que me resulta más atractivo. Y si me pongo en la piel del lector, pienso que también es más...

-¿... estilo zapping?

-Exactamente. Una novela gira en torno a un único punto, resulta más reiterativo, como si fuera la misma frase dicha de formas distintas. En cambio, el relato tiene ese punto de que es infinitamente más variado en sus posibilidades.

-¿Por qué el título?

-Es como un torbellino que alberga diferentes temáticas bajo estructuras diferentes.

-'La transformación' era una novela pornográfica, ultraviolenta y desprovista de sentimientos. ¿Sigue en la misma línea?

-'Vorágine' es heredera de 'La transformación', tanto en su estilo literario como en las temáticas. Sigue siendo una obra brutal, muy sexual, explícita y visceral. La diferencia es que al ser 85 relatos, hay hueco para el romanticismo en algunas historias. En un relato puedo ser crudo con el lado más cruel de la esperanza humana y en el siguiente, más sentimental, quizás desde un punto de vista tragicómico, pero que permite intuir un corazón quelate y que sufre.

-¿No hay una unidad? Parecerán escritos por personas diferentes...

-Claro, es que a lo largo de estos dos años pasas por distintos estados anímicos. Por eso, de un relato o otro, puede haber un salto grande en cuanto al enfoque.

-¿Cómo se le ocurrió presentarse a este Premio?

-De pura casualidad porque ni siquiera conocía la editorial Ediciones Irreverentes. La encontré por internet, buscando con el término 'realismo sucio'.

-¿De verdad cree que sus obras se encuadran en ese estilo?

-Son etiquetas que sirven para dar a entender de forma rápida a un desconocido qué es lo que haces.

-'La transformación' no era una novela muy realista.

-No, era más 'sucio' que 'realismo'. He escuchado otros términos que quizás le encajaban mejor, como 'ficción transgresiva', que se acercaba más al concepto de literatura 'killer', pero no sé hasta qué punto da en la diana.

-Alguien le comparó con Bret Easton Ellis.

-Ciertamente, en 'American Psycho' hay escenas atroces que pueden conectar con 'La transformación' o 'Vorágine', que mantiene la línea dura, cruel, visceral, salvaje, tragicómica y pornográfica, ya que muestra al ser humano de una forma desoladora. Hay páginas que pueden revolverte un poco el estómago.

-La suya es una pornografía nada excitante si me permite decírselo.

-Sí, cuando abordo el tema sexual no busco excitar. No es una literatura erótica, sino que busco plasmar de forma visual y cruda un aspecto que a todos nos gusta, pero desde el punto de vista del impulso animal. Me gusta que se imponga el aspecto más primitivo sobre el romántico o el sentimental.

-¿Está trabajando ahora en alguna obra?

-Ahora mismo, estoy escribiendo simultáneamente una novela -la tercera porque la primera quedó inédita- y un nuevo libro de relatos, en la línea de 'La transformación' y 'Vorágine'.