Borrar
Bolsas y cubos colgados de uno de los postes instalados en Hernani, donde la recogida se realiza por la noche. :: UNANUE
Gipuzkoa se enreda en el puerta a puerta
RESIDUOS. POLÉMICA POR EL PUERTA A PUERTA

Gipuzkoa se enreda en el puerta a puerta

La decisión de 34 ayuntamientos de Bildu de adoptar el sistema ha provocado una viva polémica

FERNANDO SEGURA

Domingo, 26 de febrero 2012, 09:54

La extensión de la recogida de basura puerta a puerta (PaP) a 34 municipios gobernados por Bildu ha provocado esta semana una viva polémica. El sistema, que hasta ahora se ha aplicado solo en cuatro localidades (Usurbil, Hernani, Oiartzun y Antzuola), se ampliará a comienzos del próximo año a gran parte del territorio. Una de las excepciones podría ser Donostia, cuyo ayuntamiento todavía no ha decidido si se sumará al PaP.

Estamos ante un cambio radical. Conlleva la retirada de los contenedores de la calle y su sustitución por postes en el exterior de los portales en los que colgar cubos y bolsas. PNV, PSE y PP se muestran contrarios y piden que se tome en cuenta la opinión de los ciudadanos antes de ponerlo en marcha.

En las siguientes líneas exponemos las claves de una controversia que no ha hecho más que empezar.

Los antecedentes

El PaP, alternativa a la incineradora En las dos legislaturas anteriores, las de González de Txabarri (2003-2007) y Markel Olano (2007-2011) se lograron complejos acuerdos institucionales que desembocaron en la aprobación del Plan de Residuos. Este documento, todavía en vigor, contempla una red de infraestructuras para el tratamiento de los residuos, especialmente plantas de compostaje y una incineradora.

Las elecciones forales y municipales de mayo de 2011 auparon a Bildu a la Diputación y al gobierno de la mayor parte de las mancomunidades y ayuntamientos.

La coalición se opone a la incineradora e impulsa como sistema alternativo la extensión de la recogida puerta a puerta. El objetivo es alcanzar unas elevadas tasas de reciclaje y compostaje, de manera que la incineradora sea innecesaria.

La cuestión crucial a determinar es qué grado de recogida selectiva vamos a ser capaces de alcanzar y, en base a este dato, decidir si la incineradora es necesaria o no. El Plan de Residuos prevé que en 2016 el 57% de la basura se recicle o composte (ahora estamos en el 43%). El 43% restante (213.000 toneladas) se incineraría en la planta de Zubieta, generando energía eléctrica. Los vertederos se cerrarían.

La Diputación gobernada por Bildu fija unos objetivos más ambiciosos. La institución foral no ha dado a conocer ningún documento, de forma que los únicos datos son los ofrecidos en declaraciones públicas por los responsables forales. El diputado de Medio Ambiente señaló en las Juntas Generales, en noviembre del año pasado, que es factible alcanzar el 89% de recogida selectiva. El 11% restante se almacenaría en un «vertedero de inertes».

En esta guerra de cifras, el PSE ha aportado datos de Eurostat. El informe indica que el país que más recicla es Austria, con una tasa del 70%. Del 30% restante, el 29% se incinera y el 1% se lleva a vertedero. En el ranking le siguen Alemania (recicla el 66% e incinera el 34%) y Holanda (recicla el 60%, incinera el 39% y vierte el 1%).

El PSE considera que, a la vista de estos datos de Eurostat, el objetivo de Bildu de alcanzar el 89% es un «delirio». Por el contrario, los 34 alcaldes de la coalición que anunciaron la puesta en marcha del PaP en 2013 defienden que es viable y ponen como ejemplo que en Antzuola se ha llegado al 90%.

Los socialistas subrayan que los porcentajes que se esgrimen sobre reciclaje se deben corregir a la baja. Es decir, de la cantidad total de residuos que se recogen selectivamente una parte importante, entre el 20% y 30%, se desechan. En otros lugares

Reciclaje e incineración van de la mano

Otro elemento clave en la discusión estriba en saber si el PaP que se quiere implantar en Gipuzkoa es un experimento de resultado incierto o si se trata de un sistema que se ha demostrado eficaz en otros lugares.

En la página web del Ayuntamiento de Usurbil dedicada a explicar el funcionamiento de la recogida se asegura que el PaP se realiza «en más de setenta municipios de Cataluña y Mallorca, así como en miles de localidades del norte de Italia, Bélgica, Francia...Por tanto, queda demostrado que es viable».

El PSE, en declaraciones realizadas esta semana, ha indicado que el PaP puede ser viable en zonas de baja densidad de población, pero critica su generalización a todos los municipios sin tener en cuenta las distintas realidades urbanas o geográficas.

Ecologistas en Acción se opone al argumento de que no es viable en localidades de población elevada. Citan el ejemplo de Aarhaus (segunda ciudad de Dinamarca), con 250.000 habitantes; Niort (Francia), 64.000 habitantes o Monza (Italia), 123.000 habitantes.

Tanto los socialistas como el PNV y el PP indican que el PaP no es una alternativa a la incineradora. De hecho, señalan que en Cataluña funcionan cuatro plantas (dos en Barcelona, una en Tarragona y una en Gerona) y Mallorca cuenta con la de Son Reus. En Francia, siguiendo los datos de Eurostat, se incinera el 34% de los residuos, en Italia el 12% (45% a vertedero) y en Bélgica el 35%.

A tenor de los datos de Eurostat y de los ejemplos catalán y mallorquín, el criterio que prevalece es complementar la recogida selectiva (bien mediante el puerta a puerta u otros sistemas, como el quinto contenedor) y la incineración. Situación actual

Saturación y transporte a Francia y Navarra

La implantación del PaP en Hernani, Usurbil, Oiartzun y Antzuola ha supuesto un notable incremento en la recogida de residuos orgánicos. Este hecho ha provocado la saturación de la planta de compostaje de Lapatx. Esta instalación tiene capacidad para tratar 3.000 toneladas, pero recibe 6.000. La Diputación ha tomado la decisión de trasladar la parte sobrante al País Vasco francés (Itsassou) y a Navarra (Carcastillo o Ziordia).

El Plan de Residuos preveía construir una nueva planta de compostaje en Bergara y otra de biometanización en Zubieta. Los plazos de ejecución iban acordes con la planificación realizada en aquel documento, previsión que evidentemente no contaba con la implantación del PaP en cuatro localidades. Moratoria

Incógnita sobre la gestión de los residuos

El sistema de gestión de residuos en Gipuzkoa es una incógnita. A día de hoy, el Plan de Residuos en vigor y la incineradora se encuentran en una situación de 'impasse'. Sobre la mesa no existe ningún plan alternativo. Se supone que en junio, una vez concluida la moratoria pactada entre PNV y Bildu, se sabrá qué hacer con la basura. Pero ni siquiera eso es seguro. Si se mantiene el pulso, el asunto se podría judicializar.

Entre tanto, las constructoras de la incineradora reclaman al Consorcio de Residuos que tome decisiones, el Banco Europeo de Inversiones ha cerrado el grifo del crédito y Bizkaia amaga con no renovar el acuerdo por el que recibe 25.000 tonelada anuales de residuos de Gipuzkoa. Y, lo que es más preocupante en términos de plazos, los vertederos se están llenando a ritmo acelerado. El objetivo era cerrarlos en 2014, fecha de puesta en marcha de la incineradora. Incluso si siguen adelante las obras, ese plazo ya es casi imposible de cumplir.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariovasco Gipuzkoa se enreda en el puerta a puerta