«El padre de un amigo fue el que me metió el gusanillo del motor»

El piloto oñatiarra David Ardions tiene el Campeonato Vasco de Montaña de Turismos prácticamente en el bolsillo tras la victoria cosechada el pasado fin de semana en Arlabán, cuarta y penúltima cita del campeonato. Pero pese a ello no afloja el acelerador y está dispuesto a seguir dando que hablar. Se mueve como pez en el agua cuando llueve, pero el sábado se quitó el 'sanbenito' de piloto de mojado y demostró que es un conductor todoterreno que aspira a todo. Un enamorado del pilotaje con muchas tablas.

-Se ha consolidado como uno de los pesos fuertes de las Subidas de Montaña con tres victorias esta temporada, las tres cerca de casa ¿Cómo se siente?

-Muy contento con los resultados obtenidos hasta la fecha. He ganado en la categoría de turismos en Udana, Gorla y Arlabán, siendo segundo en Aia. Además en Udana fui primero en la general en la victoria más importante de mi vida.

-¿Desde cuando esa pasión por el automovilismo?

-Desde muy jovencito, el padre de un amigo (Mikel), comenzó a llevarnos a eventos de este tipo y ahí empezó mi afición a las carreras.

-¿Imagino que tal y como están las cosas será difícil encontrar patrocinadores?

-La verdad es que tal y como está la situación hoy en día es más difícil encontrar esponsors, por eso agradezco el apoyo incondicional que me ofrecen mis aitas Mari Carmen y Pepe. ¡Gracias!

-¿Cuándo empezó a disputar pruebas automovilísticas?

- Me inicié en el 2006, primero con un Opel Kadet GSI, luego con un Renault Clio Sport, y en la actualidad tengo un Mitsubishi Evo VII.

- ¿Le gustaría probar con un Silver Car?

-La verdad es que llevo un tiempo planteándome correr con un Formulilla de esos, pero creo que no cuestan el dinero que se paga por ellos.

También en rallyes

-Ha confesado que ganar en Udana fue la mayor satisfacción de su carrera ¿lo dijo por el hecho de ganar en Oñati, o por el hecho de superar a un piloto de la talla de Aitor Zabaleta?

-Fue un cúmulo de sensaciones las que viví aquel día. Por un lado, el hecho de ganar en casa, y por otro lado, ser el mas rápido de toda la carrera. Estuvo muy bien.

-El sábado pasado volvió a llevarse el gato al agua ¿qué le pareció el nuevo trazado de la Subida a Arlaban?

-Para mí, fue una de las subidas más bonitas que he corrido hasta ahora. Había entrenado duro y tenía ganas de apretar las tuercas a Aitor Ramírez. (Casualidad, parece ser que tuvo algún problema con su vehículo). La verdad es que siempre achacan mis victorias al hecho de que el trazado se encuentre mojado y tenía ganas de ganar una en seco.

-Disputa también rallyes ¿hay diferencia entre pilotar en un rally y en una subida de montaña?

-En las subidas vas solo, mientras que en los rallyes corres con copiloto, en mi caso con Iosu Agirre. Correr un rally es un trabajo de equipo, de compenetración piloto-copiloto, las subidas son más individuales.

-El automovilismo es un hobby caro ¿compensa?

-La verdad es que este año hay más premios en metálico y compensa un poco más, pero en general, sí es un hobby caro.

-Oñati tiene una rica tradición automovilística ¿cómo están las cosas?

-La verdad es que sí somos unos cuantos pilotos txantxikuarras y lo bueno es que últimamente estamos destacando. ¡Ánimo peña! Asier Mugarza, Rubén Nogueiras, Juan Zelaia, Asier Samaniego, Aitor Arnaiz, Mónica Muñoz y Jon Ander Lasagabaster.

-¿Cuáles son sus objetivos lo que resta de temporada?

- La verdad es que prácticamente tengo el Campeonato Vasco de Montaña de Turismos en el bolsillo y el sábado voy a Cantabria a correr la Subida a Alysas. En agosto supongo que realizaré alguna otra carrera fuera del País Vasco puesto que últimamente se están torciendo las cosas por aquí.

- ¿Y de cara al año que viene que proyectos tiene?

- Ver venir. Espero poder hacer el Campeonato de RallySprint y de Montaña, y algún Rally de paso si es que continuo teniendo el vehículo, puesto que está a la venta. Ya de paso, si existe algún interesado...