Secciones
Servicios
Destacamos
JUANMA VELASCO jmvelasco@diariovasco.com
Martes, 2 de octubre 2012, 04:10
La brecha que históricamente ha dividido el sistema ferroviario del Estado con el del resto de Europa está cerca de pasar a la historia. Desde ayer está en marcha la adaptación de la vía de ADIF entre San Sebastián y la frontera de Irun, lo que posibilitará la circulación de trenes de alta velocidad. El gestor ferroviario invertirá 40 millones de euros en una actuación que facilitará la colocación del tercer hilo -que consiste en añadir un raíl paralelo a uno de los dos existentes-, lo que permite que por allí transiten tanto los trenes que actualmente circulan por el ancho ibérico (vía convencional en el Estado de 1,668 metros) como los que lo hacen por ancho internacional (UIC, de 1,435 metros).
Esta intervención, a la que se sumará en el futuro la adaptación de la línea entre Astigarraga y Donostia, posibilitará que por allí circulen trenes de alta velocidad. Además, la colocación de este tercer hilo permitirá que se establezcan servicios de cercanías entre San Sebastián y Bayona y que los convoyes de transporte ya no necesiten hacer transbordos de la mercancía en la frontera.
De momento, ya están en marcha las obras entre la frontera francesa y Donostia, según explicaron fuentes de ADIF. En realidad, la obra que ayer comenzó retoma la que se iba a acometer el año pasado y que iba a renovar integralmente el trazado convencional entre las dos ciudades guipuzcoanas. De hecho, las nuevas traviesas de ancho ibérico han estado esperando en las cunetas a lo largo y ancho de la vía.
Estos trabajos se paralizaron después de que el Ministerio de Fomento y el Gobierno Vasco acordaran que el TAV llegaría a Donostia e Irun adaptando la actual vía de ADIF, en lugar de construir una nueva plataforma de alta velocidad desde Astigarraga. La solución adoptada fue la de colocar un tercer hilo que posibilitara un ancho de vía por la que pudiera transitar el TAV. Se decidió entonces detener los trabajos de renovación de la vía y redefinir la actuación, colocando el tercer hilo.
La obra se retoma desde ayer. Según fuentes de ADIF, en primer lugar se retirarán las traviesas de ancho convencional que se iban a colocar, para destinarlas a otros puntos de la vía de ADIF. Posteriormente, en los 16,3 kilómetros de vía entre Donostia y la frontera francesa se colocarán 46.500 traviesas preparadas para la instalación de tres hilos o carriles metálicos.
Previamente se renovará el balasto (piedras que sujetan las traviesas) y se preparará todo el trazado (instalaciones de electrificación, sustitución de desvíos...) para posibilitar el tráfico de trenes como el TAV, que circulan por ancho internacional. Eso sí, la actuación no terminará con la colocación del tercer hilo. En esta primera fase se instalarán dos carriles metálicos, pero el trazado quedará preparado para colocar el tercer hilo con una «obra menor».
Asimismo, todavía restará que ADIF acometa la colocación del tercer hilo entre Astigarraga y Donostia, lo que permitirá que el TAV llegue a Donostia y a Irun de forma provisional en 2016. El resto del trazado del TAV entre Astigarraga y Bergara se concreta en una nueva plataforma de alta velocidad en obras que gestiona el Gobierno Vasco. Ayer mismo, el viceconsejero de Transportes, Ernesto Gasco, criticó que la intervención de ADIF entre Donostia e Irun no culmine en esta fase con el tercer hilo.
Una vez adaptada la vía con el tercer hilo entre Astigarraga e Irun, la terminal de Atocha del TAV se convertirá en estación pasante en lugar de 'fondo de saco' -de entrada y salida-, como en un primer momento se había proyectado.
Asimismo, la adaptación de la vía permitirá ofrecer servicios de cercanías hasta Bayona y agilizar el transporte de mercancías.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
No te pierdas...
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.