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Jueves, 22 de noviembre 2012, 02:17
Euskadi corre el riesgo de ser el destino de aquellos inmigrantes sin papeles a quienes se les está denegando en otras comunidades autónomas el tratamiento contra el sida. De momento, se han registrado casos puntuales, pero Osakidetza advierte: «Euskadi no puede ser el hospital de sida del resto de España».
El Gobierno Vasco pidió ayer al Ministerio de Sanidad y al resto de comunidades que afronten el problema de las personas inmigrantes sin papeles a quienes se les está negado la continuidad del tratamiento contra el sida, para frenar así la llegada a Euskadi de afectados que necesitan los antirretrovirales.
En la presentación de las medidas contra el sida, en el marco de la celebración del Día Mundial contra la enfermedad, el viceconsejero de Sanidad, Jesús María Fernández explicó que miles de personas infectadas se han quedado sin tratamiento en España después de que se haya retirado la tarjeta sanitaria a inmigrantes sin papeles.
En algunas comunidades autónomas «se están poniendo trabas al mantenimiento» de esos tratamiento con antirretrovirales, cuyo coste, según los cálculos del Gobierno Vasco, ronda los 10.000 euros anuales por persona.
Por ello, indicó que a Euskadi están llegando enfermos de sida a quienes se les ha negado el tratamiento. Estos pacientes están siendo tratados en los centros de Osakidetza. Fernández, ante este hecho, aseguró: «No queremos convertirnos en el hospital de VIH del resto de España».
En el acto estuvo también la responsable del Plan Nacional contra el Sida del Ministerio de Sanidad, Olivia Castillo. Indicó que la competencia para aplicar la legislación en esta materia corresponde a cada comunidad autónoma y subrayó que quienes estaban en tratamiento deben seguir recibiéndolo.
Moción del Senado
Castillo recordó que el Senado aprobó una moción para facilitar esos tratamientos a todos los afectados y aseguró que aún es difícil cuantificar el número de personas a quienes se les ha negado esos medicamentos.
El viceconsejero destacó que «esos tratamientos son vitales para proteger la vida de los afectados, pero también para reducir la carga viral en la sociedad» española y advirtió de que «se está poniendo en riesgo la vida de otras personas».
El viceconsejero reivindicó «el derecho de todas las personas que viven en España a tener acceso libre y gratuito a la terapia cuando padezca una infección de transmisión sexual».
Según expuso, el Gobierno Vasco estudia de manera individual cada caso y, si lo considera, recurre al mecanismo del arraigo familiar o social de los afectados para poder facilitarles el acceso a los medicamentos. Hasta el momento, indicó que estos casos son «excepcionales». Se irán contabilizando los que van llegando a Osakidetza para dentro de unos meses tratar de que las comunidades autónomas de origen asuman esa atención sanitaria que les corresponde.
El Gobierno Vasco realizó en la mañana de ayer un seminario sobre la importancia de las nuevas tecnologías 'on line' que facilitan consultas anónimas sobre sida, especialmente relevante cuando se trata de una enfermedad que se contagia fundamentalmente por vía sexual y en un grupo de población de 30 años de media, habituado a resolver dudas vía internet. En el mismo participó Daniel Zulaika, coordinador del Plan del Sida en Euskadi.
Informar de riesgos
Osakidetza ofrece tres iniciativas para informar sobre los riesgos de contagios. Así, la web de 'Paciente Activo', dentro de Osarean, ha recibido desde su puesta en marcha en mayo 14.500 visitas.
La segunda propuesta, 'Consulta 'on line' para hombres que tienen relaciones con hombres', se centra en el colectivo de gays donde las enfermedades de este tipo tienen especial incidencia. En el año que lleva en funcionamiento ha recibido 2.855 visitas sobre prácticas de riesgo. De esas consultas, 514 han rellenado un cuestionario y casi un centenar fueron derivadas a un centro sanitario para realizarles pruebas de VIH o sífilis.
La tercera iniciativa para resolver dudas sobre Sida es la 'microsite sobre VIH/sida', que permite aclaraciones vía telefónica o por correo electrónico.
Los datos sobre la incidencia de la enfermedad en Euskadi se mantienen. Cada año hay alrededor de 200 nuevos infectados y casi la mitad corresponden a personas con prácticas heterosexuales. El 40 % de los nuevos casos son hombres que han mantenido relaciones con otros hombres, colectivo que además acumula el 75 % de los afectados por sífilis.
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