«La emoción por la remontada fue como ganar un título»

La portera del Bera Bera fue una de los principales artífices de la proeza del domingo. El año pasado inició su segunda etapa en Donostia, después de pasar cinco años defendiendo los colores del Le Havre francés. Previamente, hizo lo propio durante tres campañas en su actual equipo. Su contrastada calidad le valió para jugar dos Olimpiadas -Atenas y Pekín- y cuatro Mundiales. Confía en poder cerrar la temporada con la consecución de uno o más títulos.

- Remontaron una desventaja de doce goles. ¿Había oído con anterioridad alguna hazaña parecida?

- Personalmente no he conocido nada como lo que conseguimos el domingo. Para mí es algo muy raro que se produzca algo así.

- ¿Cuál fue la sensación que vivió al final del partido?

- La emoción por clasificarnos al final del partido fue como si hubiéramos ganado un título. La alegría fue mayor quizá porque lo hicimos contra un equipo que nos había demostrado su superioridad al ganarnos con autoridad por dos veces. Nosotras salimos a ganar el partido, sin pensar en la eliminatoria, y a tratar de mantener la imbatibilidad de la temporada en casa.

- ¿Hubo un festejo especial tras el partido?

- Habíamos quedado ya antes para salir para ver los Carnavales, pero la clasificación hizo que al final nos decidiéramos ir todas a Tolosa, ya que antes no estábamos muy convencidas. Nos disfrazamos y marchamos para allá.

- ¿Eligió algún disfraz en particular?

- Me disfracé de paloma con la intención de pinchar a mis compañeras, ya que en los entrenamientos cuando alguien lanza muy por encima de la portería decimos que va a matar palomas. Fue una pequeña broma que se me ocurrió.

- ¿La inesperada clasificación significa que ni ellas eran tan buenas ni ustedes tan malas?

- Creo que el Vistal había demostrado por dos veces que era superior a nosotras. Esto hizo que le respetáramos mucho y con esa idea salimos a jugar, pensando que ellas eran superiores. Con esta clasificación nos hemos podido dar cuenta que tras hacer un partido perfecto somos también un equipo a respetar. Y que nunca debes aflojar. Esto nos va a dar mucha moral. Nos vale para levantar la cabeza. Estábamos preocupadas por si la eliminatoria podía afectar negativamente en otras competiciones y al final nos ha salido todo redondo.

- Realizó 15 paradas. ¿Está satisfecha con su actuación?

- Sí. Es para estarlo, pero más que por mi actuación porque sirvió para que nos clasificáramos. Haber conseguido un 50% de paradas no te garantiza que vayas a ganar por más de doce goles, por eso estoy contenta por todo. Siempre intento alcanzar el máximo. Se puede decir que el 50% de paradas es mi referencia, pero no siempre lo puedes lograr.

- ¿Cuándo comenzó a creer en la clasificación?

- Empecé el partido muy tranquila, pensando sólo en ganar. Cuando abrimos el hueco de ocho goles sólo pensaba en que en el segundo tiempo fuéramos capaces de seguir igual de concentradas. Cuando llegamos a los diez empecé a creer que era posible y con los catorce goles de diferencia me dije que ya no se nos podía escapar. Al final, tuvimos un momento de tensión, pero después de lo que pasó las polacas no merecían la clasificación, sino nosotras.

- Esta es su segunda etapa en Donostia. ¿Es muy diferente de la primera?

-Cuando vine por primera vez (2003) estuve tres años. Era muy joven y sin apenas experiencia. Los dos primeros fueron de adaptación, en el tercero jugué bastante y me abrió el camino para jugar en Europa -fichó por el Le Havre-. En Francia estuve cinco años muy a gusto, pero cuando recibí de nuevo la oferta del Bera Bera volví con una mayor responsabilidad. Sentí como si hubieran valorado muy bien el trabajo que hice fuera.

- ¿Su titularidad es indiscutible?

- Intento siempre jugar bien y tengo una convivencia muy buena con Yamiley, que es joven y trabaja muy bien. Al final, es la entrenadora quien decide. Ahora tengo la confianza de Reyes. Hablamos mucho en cada partido y comentamos cuándo es conveniente descansar o cuándo hay mucha carga de partidos.

- ¿Cuáles son sus mejores recuerdos con su selección?

- Las dos Olimpiadas que he jugado en Atenas y Pekín. Siempre es bonito representar a tu país. Después cambiaron de seleccionador. A Londres no he podido ir, pero no pierdo la esperanza de volver. Acudir a la selección es un premio al trabajo que haces en tu club.

-¿Cuánto más podremos disfrutar de Darly en Donostia?

- Todavía tengo un año más de contrato y luego ya se verá. Estoy muy contenta y no tendría ningún problema en seguir.

- ¿Le ha llegado alguna oferta?

- En el mercado de invierno me han llamado dos equipos de Rusia y uno de Rumanía, pero los rechacé. No tenía intención de irme. Tengo claro que si algún día me voy del Bera Bera será para jugar en otro país.

- ¿Terminar la temporada sin ningún título sería una decepción?

- Sí, porque estamos luchando por todos los títulos. Vemos que tenemos muchas opciones de lograr alguno. Debemos ganar al Itxako -mañana en Estella- para recuperar el liderato. Si terminamos la temporada en blanco nos llevaríamos bastante disgusto.

- ¿Qué aspectos hay que mejorar?

- Todo se puede mejorar, pero sobre todo los momentos malos que atravesamos en los partidos. Debemos tratar de controlarlos mejor y bajar los números de pérdidas de balón y las faltas técnicas.