Puntualización de la familia Zuloaga sobre el legado del pintor

Ignacio Suárez-Zuloaga Gáldiz, presidente de la Fundación Zuloaga, precisa una información publicada por este periódico el pasado 3 de marzo al subrayar que tres de los cuadros cuya venta se atribuye a su familia -'Corrida de toros en Eibar', 'La calle de las pasiones' y 'Nájera'- fueron vendidos por el pintor en vida y «nunca han formado parte de la Colección Zuloaga». El primero de ellos, según explica Suárez-Zuloaga, formaba parte de una colección alemana, el segundo lo vendió una familia de Barcelona y con el tercero hicieron lo propio los descendientes del coleccionista argentino Santamarina. También explica que una colección que comenzó a comienzos del siglo XIX tiene periódicos cambios en función de las divisiones de herencias y los cambios de objetivos de cada generación; en los últimos años se ha comprado una colección de armas de Ramón y Eusebio Zuloaga, dos importantes piezas de damasquinado de Plácido Zuloaga y seis lienzos de Ignacio Zuloaga.

El máximo responsable de la Fundación recuerda que la Colección Zuloaga es y ha sido siempre de carácter privado, y que su exhibición pública desde el siglo XIX en Eibar y desde 1925 en Zumaia ha sido costeada por la propia familia. «A diferencia de otros casos, nunca se han recibido ayudas públicas», zanja Suárez-Zuloaga. Dado que en la actualidad hay siete museos en el País Vasco que albergan piezas de la familia, la Fundación centra su prioridad en «la investigación y difusión de la cultura de esta saga de artistas, y de sus amigos y rivales en Europa y América». Un acervo recogido en las webs www.loszuloaga.com, www.modernismo98y14.com y en el canal de Youtube ModernismoZuloaga.