El PNV censura los«autos extraños o frikis» sobre las subordinadas

Las fuerzas políticas, que hasta ayer habían mantenido un escrupuloso respeto sobre las sentencias judiciales en torno a la deuda perpetua de Eroski y Fagor, rompieron el silencio. Y lo hizo nada menos que el partido que sustenta al Gobierno, el PNV, cuyo portavoz, Luis Javier Tellería, se refirió en el Parlamento a las últimas decisiones sobre las polémicas aportaciones -una en contra del BBVA, por haberlas vendido, y otra aclaratoria posterior en la que el juez Bermúdez carga la mano sobre la cooperativa- como «autos extraños o frikis».

Sucedió en el enésimo debate parlamentario sobre el polémico producto del que ambas cooperativas colocaron 660 millones de euros entre 40.000 personas con la ayuda de las entidades financieras. Un debate improductivo, porque las propuestas enfrentadas de los partidos impidieron un acuerdo en la Cámara. La discusión fue impulsada por PSE y UPyD, pero no salió adelante ni la enmienda consensuada entre ambos partidos ni la de EH Bildu. La propuesta del PNV no se votó.

Como suele ser habitual, la controversia se centró en el papel del Instituto Vasco de Consumo, Kontsumobide, que medió en la solución ofrecida por Eroski para canjear su deuda: una quita del 30% y del restante 70%, un 15% en metálico y el 55% en bonos a 12 años al euríbor más un 3%. Bildu, PSE y UPyD censuraron al Gobierno Vasco por avalar esta solución, al entender que siempre se pone enfrente de los afectados y a favor de las cooperativas, y la formación abertzale incluso anunció que pedirá la reprobación del consejero de Consumo, Jon Darpón, si no se desmarca de la misma. El PNVdefendió la labor de Kontsumobide y de Darpón, que a su juicio han actuado con «rigor».