Vitoria disfruta a lo grande de Santiago

Cerca de 6.000 blusas y neskas tomaron las calles de Vitoria ayer dos años después del parón pandémico para celebrar el preludio de las fiestas de La Blanca. Son el doble que en 2019, cuando nadie se imaginaba que un nuevo coronavirus provocaría un giro radical en nuestras vidas. La inmensa mayoría se dejaron ver desde primera hora del día para exprimir toda la jornada festiva.

Está claro que los blusas y neskas están hechos de otra pasta. Y ya no solo por la resistencia festiva que demuestran en esta jornada de Santiago, sino por su capacidad física. De ello hicieron gala durante las pruebas de herri kirolak celebradas en la plaza de Los Fueros. Desde sokatira, hasta la recogida de mazorcas. En mitad de un calor que agotaba incluso al público, se remangaron las camisas y se desafiaron por ver quién es el mejor.

Un pulso que supo aguantar Zoroak, que en sokatira logró cosechar más de una victoria. «Es la primera vez que conseguimos pasar de ronda», festejaba un exhausto José Luis Fernández. «La cerveza de la previa ha ayudado», bromeaba sobre su particular bebida isotónica. «Al principio nos ha costado meternos en el duelo, pero una vez nos hemos coordinado hemos logrado la victoria. Pero está claro que si el rival fuese las propias fiestas no le ganábamos ni locos, se hace duro», reía, integrándose en la cuadrilla que celebraban por todo lo alto el triunfo.

El mismo ambiente se respiraba en Okerrak. Irune Hernández cosechó una victoria en la prueba de recogida de mazorcas, que consiste en coger los palos de madera que hay en la pista uno a uno y guardarlos en una cesta. «¡Me falta el aire!», confesaba, tras pillar asiento. «Llevamos seis meses preparando a conciencia la prueba, con entrenamientos intensos en Ali», comentaba con sorna un compañero. «He ido primero a las más lejanas para poder tener fuerzas al final. Pero con este calor y la resaca...». Y eso que todavía les quedaba el plato fuerte, el paseillo de la tarde.

El público se lo pasó en grande. Las gradas de la plaza colgaron el 'completo' y agradecieron el derroche de los jóvenes y adultos. «Es divertido, pero también entretenido. No se lo toman como una prueba más, realmente vienen a competir», comentaba Isaac García. «No se notan los dos años en blanco, vienen fuertes», reía Iratxe Astui, que añadía: «Que reserven algo de fuerzas que las fiestas no han hecho más que empezar».

A la cuadrilla Basatiak no hay quien le plante cara en la competición más esperada del Día de Santiago. Por quinto año consecutivo se proclamaron vencedores de la Carrera de Barricas, que ayer celebraba su V edición. 225 litros de tinto Eguren Ugarte que se llevaron como premio tras un tiempo de 10,47 minutos. «¡Para hacer kalimotxo!», bromeaban Mario Salazar, Peio Vitoria, Jone Septien y Leire Monje, artífices de la gran gesta. Para ellas era su primera vez, «la experiencia ha sido chulísima. No habíamos entrenado nada pero nos han estado animando todo el rato», celebraban instantes después de finalizar la carrera. Ellos repetían y confesaban el secreto para repetir como ganadores un año más, «una buena salida y va rodado. Después solo es aguantar», aseguraban Mario y Peio.

La cita, organizada por la asociación Vitoria-Gasteiz Wine City y la Comisión de Blusas y Neskas, contó con 92 participantes divididos en 23 equipos. Una cifra muy similar a la de años anteriores.