Urretxu

Moción y declaración en contra de las últimas sentencias sobre el euskera

Los puntos seis y siete del orden del día estuvieron estrechamente ligados, haciendo referencia a las últimas sentencias en contra de la autonomía local que limitan el desarrollo pleno de las competencias municipales en materia lingüística.

«Es un tema que, desgraciadamente, viene de lejos, pues desde 2020 se han dictado 15 sentencias que atacan directamente al uso y promoción del euskera. Ya el 6 de julio el Tribunal Constitucional anulo el artículo 6.2 de la Ley de Instituciones Locales de Euskadi, anulando así a los Ayuntamientos vascos la posibilidad de comunicarse solo en euskera. Esto nos llevó a concentrarnos en Bilbao, junto con otros representantes municipales y agentes de la actividad cultural vasca, en contra de esta decisión, así como a registrar una moción en el Ayuntamiento de Urretxu en nombre de EAJ PNV de Urretxu», rememoró la concejal Maialen Fidalgo.

«El 17 de octubre, nos despertamos con otra sentencia, esta vez del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, que respondiendo a un recurso del partido VOX anulaba varios artículos del decreto que desarrolla la Ley de Instituciones Locales de Euskadi en materia de euskera, y dos días más tarde con otra sentencia, en la misma dirección, que respondía a un recurso del Partido Popular, en lo que es un claro caso de Judicialización de la Política», expuso. «Ante estas sentencias, que no son firmes, el lehendakari ha anunciado que el Gobierno Vasco interpondrá sendos recursos y que el Gobierno Vasco actuará contra las mismas en todas las instancias posibles», indicaba Maialen Fidalgo. «Es preocupante intentar hacer del euskera una fuente de conflicto, y es por eso que hoy traemos dos documentos a este Pleno, una moción en contra de la decisión tomada por el Tribunal Constitucional en julio, que firmamos EAJ-PNV y EH Bildu y una declaración de la comisión ejecutiva de Eudel en relación a la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco», explicó.

EAJ-PNV y EH Bildu votaron a favor de ambos textos y el PSE-EE en contra.