Los trabajos de cimentación del puente móvil finalizarán el próximo mes de mayo

Los trabajos del puente móvil de Ondarroa avanza a fuerte ritmo con la instalación de las bases que sostendrán el renovado equipamiento. Así, se procede a la colocación de micropilotes para anclar los cimientos sobre los que se asienta la pasarela declarada Bien Cultural por el Gobierno vasco en 2008, para la finalización de esta fase en mayo.

De cara a lograr su estabilización, se han realizado unas excavaciones para dotar a la estructura de un sostén necesario. Una vez construida la base se lleva a cabo el montaje de la estructura sobre las pilas del puente. A partir de aquí se procede a la instalación del mobiliario como la colocación de barandillas, urbanización, instalación y pruebas del mecanismo de giro, con las que se podrá llevar a cabo su apertura.

La cimentación del puente es la fase más dificultosa y la que ha encarecido el proyecto final. Tras detectarse que la estructura estaba en mal estado se tuvo que encargar un nuevo proyecto. Para ello, la Diputación aprobó el recalce de la base por importe de. 449.000 euros.

En las últimas semanas se ha desatado una polémica debido a que la Diputación plantea la colocación de un puente de color gris azulado perdiendo su antigua tonalidad verde que requiere el ayuntamiento. La Diputación encargó una investigación a la Facultad de Química de la UPV que determinó que en su origen era de color gris.

Tras tres intentos, el puente fue adjudicado por cerca de 716.000 euros. En junio de 2019 fue desmontado y cuando finalicen los trabajos se podrá recuperar una estructura que cuenta con muy pocos ejemplos activos en Europa. En estos trabajos se ha tenido que cortar el acceso peatonal desde la pasarela de Calatrava hacia el paseo que discurre junto a la ría utilizándose como alternativa el paso subterráneo.