Lo que bien empezó en casa mal terminó en Getaria

El bote hondarribitarra gozaba de dos segundos de ventaja respecto a Bermeo Urdaibai antes de entrar en la segunda ciaboga. Ioseba Amunarriz dio la orden a Galder Ezponda y éste cogió el remo corto para dar el viraje. Numerosas veces habrán repetido este movimiento, pero el domingo en Getaria no salió bien. «Suelen pasar estas cosas», comenta el veterano patrón. ¿La solución? «Mirar hacia adelante».

La ciaboga por estribor tuvo que solventarse volviendo ligeramente hacia la popa para darla bien y encarar el tercer largo. Ahí Matrix Hondarribia perdió algo más de medio minuto y tuvo que apretar de lo lindo para perder los menos puntos posibles. Solo superó a Zierbena y Ares, quien cometió el mismo error, y se quedó a apenas dos segundos de Getaria, compañero de tanda, y a cuatro de Lekittarra, sexto. Esos pequeños segundos privaron a la Ama Guadalupekoa de al menos mantener el liderato.

«Sí que es verdad que en todas las ciabogas intentamos entrar lo más rapido posible y con la idea de perder el menor tiempo posible. La de ayer –por el domingo– fue muy rápida», explica Ioseba Amunarriz. Tras la regata, los rostros de los remeros de Matrix Hondarribia mostraban desesperación, rabia y lamento.

A pesar del resultado, desde ya Matrix Hondarribia tiene que darle la vuelta a la situación. Para ello, el sábado en Ondarroa y el domingo en Castro Urdiales la tripulación tiene nuevas opciones de volver a saborear la victoria. «Este equipo ha recibido muchos golpes y siempre se ha levantado. No tengo dudas de que volverá a sacar su identidad y que otra vez estará arriba en la pelea por las banderas», anima Amunarriz.

Aquello vino después de vivir una gran fiesta en Hondarribia. El sábado la localidad fue la capital del remo tres años después, con un ambiente que volvió a evidenciar la fuerza que tiene el color verde en el remo. «Parecía que el espigón estaba más lleno que nunca. La gente está con ganas de ver las regatas y de animar a la trainera», aplaude el patrón. En lo deportivo, la Ama Guadalupekoa fue segunda tras Bermeo Urdaibai y aumentó la distancia de tres a cuatro puntos con el segundo clasificado, Donostiarra. Amunarriz recogió el maillot rojo de líder y agradeció, señalándose el corazón, el apoyo de los seguidores hondarribitarras.

La fiesta del remo se alargó a la jornada del domingo. Las ligas ETE y ARC-1 disputaban sus respectivas regatas en Hondarribia, donde la tripulación femenina local fue la más rápida y terminó ondeando la bandera de Txingudi con cierta ventaja, al superar en trece segundos a Hibaika. Las chicas quisieron romper la regata desde el principio y lo lograron, ya que la diferencia en ciaboga ya era de cuatro segundos.

Hondarribia Bertako Igogailuak llegó a la regata de casa después de haber ganado el sábado en Ondarroa. En ambas jornadas las de Iker Cortés terminaron por delante de Hibaika, principal perseguidora en la Liga ETE. La patrona Miren Garmendia ondeó por primera vez en la historia de la trainera femenina de Hondarribia dos banderas en el mismo fin de semana. 16 remeras participaron entre las dos jornadas.

Las hondarribitarras tienen casi asegurado el ascenso a la Liga Euskotren ya que las dos primeras clasificadas de la Liga ETE estarán el proximo curso entre las ocho mejores del Cantábrico. Deusto, tercera, está a 19 puntos por lo que si nada ocurre en las cuatro regatas restantes Hondarribia Bertako Igogailuak ascenderá a la máxima categoría un año después de su descenso.

Matrix Hondarribia 'B' ocupó la sexta plaza en la regata de casa del domingo y es séptimo en la Liga ARC-1, con 60 puntos, los mismos que Zumaia y uno más que Castro. Tres botes en apenas un punto. Restan dos jornadas para concluir la liga y la segunda tripulación tiene asegurada la continuidad en la segunda categoría del remo del Cantábrico.