
Irun
«Robotizar o digitalizar la economía tiene riesgos, pero quizá no hacerlo sea peorSecciones
Servicios
Destacamos
Irun
«Robotizar o digitalizar la economía tiene riesgos, pero quizá no hacerlo sea peorJulián Estévez es profesor de Ingeniería en la Universidad del País Vasco e investigador en robótica e Inteligencia Artificial, además de divulgador científico. Invitado por el Foro Ciudadano Irunés, este lunes, a las 19.00 en la sala 2 de Palmera Montero, imparte una charla titulada 'Inteligencia artificial: luces y sombras'.
– ¿Qué temas abordará en la conferencia que ofrecerá mañana?
– Será una charla divulgativa y accesible en la que intentaré plantear un sentido crítico respecto a las tecnologías más de moda hoy en día. Entre otras cuestiones, se responderá a las siguientes preguntas: ¿para qué sirve ChatGPT y qué personas son las que más lo usan? ¿Va camino la guerra de Ucrania de ser un conflicto con tecnología de ciencia ficción? ¿La inflación actual está acelerando la destrucción de puestos de trabajo en favor de los robots?
– ¿Cree que existe una cierta demonización de las nuevas tecnologías, y concretamente de la Inteligencia Artificial?
– No creo que la gente odie la Inteligencia Artificial, es más probable que el público esté un poco saturado de tantas noticias al respecto, porque los avances van muy rápido. Pero la gente utiliza aplicaciones de Inteligencia Artificial muy a menudo: hablar con Alexa, pedir recomendaciones sobre qué película ver, usar el buscador de Google...
– Hay una creencia bastante extendida sobre que el uso de pantallas puede ser perjudicial para el desarrollo de niños y niñas; sin embargo, hay estudios que desmienten esta afirmación.
– Creo que es un error que exista ese debate. Cuando se empezó a aplicar la inteligencia artificial en los colegios había una tendencia a reducir todo al empleo del ordenador por parte de los alumnos. Eso ya no es así. Instituciones como la Unesco dicen, textualmente, que lo importante es que el alumno sea el centro de atención y que la tecnología digital se utilice como complemento para mejorar su enseñanza. La Inteligencia Artificial en la educación no sólo sirve para copiar en exámenes o inventarse redacciones. Las aplicaciones pueden servir para ahorrar tiempo al profesor y los alumnos o mejorar el proceso de aprendizaje. Por ejemplo, que cada alumno tenga cifras diferentes en un examen del mismo nivel de dificultad; identificar si un estudiante tiene dislexia o alguna necesidad que no se haya percibido, o que pueda seguir las clases desde casa cuando esté enfermo.
– ¿Cuáles cree que son las claves para abordar una educación digital responsable?
– Lo primero es dar a los profesores más capacidad de decisión y autonomía en sus centros escolares, que no les mareen tanto con diferentes normativas y carga burocrática. Los que más saben de enseñanza son los profesores que pasan ocho horas al día en los centros. El empleo de pantallas en las aulas está pensando para que se realice bajo la supervisión del profesor, y de este modo, no se tiene por qué producir ninguna acción negativa, como aquel episodio que ocurrió hace algunos meses sobre estudiantes que hacían fotos de sus compañeras sin su consentimiento. Las nuevas tecnologías deben utilizarse de la manera en que se haya comprobado que son útiles, aunque, como la educación es un sector tan poliédrico y multifacético, es difícil saber con antelación qué funciona y qué no.
– ¿Qué retos plantea la Inteligencia Artificial respecto a su aplicación en la vida cotidiana?
– Lo que está ahora de moda es la Inteligencia Artificial generativa: Chat GPT, Google Genie, los softwares que crean imágenes o videos a partir de textos... Creo que, a la larga y poco a poco, la población irá aprendiendo cada vez más sobre este tipo de sistemas. Al igual que llegó un momento en que la gente aprendió a usar ordenadores sin haber tenido conocimientos previos, puede ocurrir lo mismo con este tipo de programas. Quizá en treinta años echemos la vista atrás y nos preguntemos cómo hacíamos para trabajar o buscar cosas en internet sin tener ChatGPT... De la misma manera, está habiendo una ola de aplicaciones y las empresas, las pymes y las grandes, tienen que reciclarse continuamente, adaptar sus ervicios y productos para no quedarse atrás.
– Siendo algo que va a estar cada vez más presente en nuestras vidas, entiendo que todos iremos formándonos al respecto.
– Sí, al igual que ocurrió con los ordenadores y los móviles. Hoy en día, por ejemplo, para recibir notificaciones de la propia administración o del Gobierno es necesario tener un móvil. Casi te están obligando a llevarlo en el bolsillo. Es posible que, poco a poco, empiecen a permear en la sociedad este tipo de tecnologías. Quizás haya burbujas, se pierda interés en algunos momentos, se recupere... Pero creo que estas tecnologías son interesantes y han venido para quedarse.
– Hay quien alerta de que la Inteligencia Artificial puede acabar con muchos empleos. ¿Qué hay de cierto en esto?
– Esto es algo que lleva ocurriendo siglos. El desempleo tecnológico no es una cosa nueva de la Inteligencia Artificial, pero no siempre se ha cumplido: se ha comprobado que cada vez menos gente se dedica a la agricultura pero, también, que en las últimas décadas el número de contables no ha dejado de subir. Quienes sabemos de Inteligencia Artificial nos preguntamos cómo una labor tan mecánica y programable no para de aumentar. La aparición de una nueva tecnología no siempre implica que vaya a tener éxito. Amazon, por ejemplo, creó unos supermercados sin cajas y sin cajeros, en los que el cliente iba llenando su cesta y, mediante cámaras y sensores, se detectaba lo que se había comprado y se le cobraba sin pasar por una caja. Pero ahora, están retirando esa tecnología, alegando que no funciona. Por otra parte, robotizar o digitalizar la economía puede tener riesgos para el empleo, pero quizá no hacerlo sea peor. Si el resto de regiones de nuestro entorno lo hacen y se vuelven más competitivas, las fábricas irán allí y nosotros nos quedaremos mermados. Robotizar tiene riesgos, pero no hacerlo quizá sea más peligroso.
– Es cuestión de buscar el equilibrio.
– No todo lo que sale en los telediarios funciona ni es sencillo. Nos pueden enseñar una noticia sobre robot muy avanzado, pero ese robot no va a estar al día siguiente instalado en la fábrica. Un ejemplo de ello es que llevamos décadas a vueltas con el coche autónomo. Hay una sobresaturación de información, y es difícil seguirla.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Horarios, consejos y precauciones necesarias para ver el eclipse del sábado
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.