
Hernani
«Comencé muy nerviosa, pero me notaba con una chispa diferente»Secciones
Servicios
Destacamos
Hernani
«Comencé muy nerviosa, pero me notaba con una chispa diferente»Laiene Pikabea se proclamó el pasado domingo por primera vez campeona de Urrezko Aizkora. La vecina de Ereñotzu, a sus 21 años y con la ... txapela todavía caliente, relata la emoción por lo conseguido, pero también el trabajo y sacrificio que hay detrás. Un trabajo que no ha estado exento de la complicación que suponen las lesiones, en su caso en el hombro.
–El pasado fin de semana ganó su primera txapela, ¿cómo lo vivió?
–Fui muy nerviosa, porque he estado dos años lesionada y estuve parada del todo, o sea que ha sido como comenzar de nuevo. En octubre tuve el Campeonato de Euskal Herria y este era el segundo importante que afrontaba. Por ello llegué nerviosa, pero es verdad que en los entrenamientos me notaba con una chispa diferente. Ya decía en casa que me sentía muy bien y creo que luego se ha notado en el resultado.
–O sea que tuvo una lesión complicada.
–Sí, pero al final no hemos sabido realmente a qué se debía. Al cortar notaba dolores en el hombro. Iba en aumento y en un campeonato de Euskal Herria vi que no podía aguantar y tuve que parar. He visitado un buen número de especialistas y no me han sabido decir a qué se debía. Hoy es el día que sigo con molestias, aunque menos ya que he fortalecido mucho la zona trabajando en el gimnasio.
–Complicado.
–Sí, al principio no podía dormir o escribir del dolor que tenía.
–¿Cómo se desarrolló el campeonato en sí?
–Me llamaron en enero y me dijeron que lo comenzaríamos a mediados de febrero. En la primera clasificatoria me tocó ante Nerea Sorondo, que ha sido la mejor, y lo cierto es que fui pensando que estaba muy difícil. Gané y para mí fue un subidón ya que siempre ha sido un referente. Pasé una segunda clasificatoria y me metí en la final.
–Final a tres.
–Sí, Karmele Gisasola, Uxue Ansoregi y yo, siendo la más joven. Consistía en un trabajo muy corto en cuanto al tiempo al ser televisado. Por ello trabajamos con dos troncos pequeños de 45 pulgadas. Mi estrategia fue salir muy fuerte. El primer tronco Karmele y yo lo terminamos a la vez y en el segundo ya le saqué diferencia. Tardé algo más de cuatro minutos en cortar los dos troncos, un trabajo muy explosivo.
–¿Próximos retos?
–Han comenzado ya a llamar para las exhibiciones, además en agosto está el campeonato de Ramón Latasa, para mí muy especial porque el año pasado retomé la competición en él. Entonces fue una motivación para volver tras la lesión. En octubre será el Campeonato de Euskal Herria, en noviembre el de Gipuzkoa y en diciembre en Donostia, la Urrezko Aizkora en Santo Tomás. La cita más importante es el de Euskal Herria.
–¿De qué manera llegó al mundo aizkolari?
–Pues tontamente. Mi padre siempre ha tenido muchísima afición. Mi hermano cortaba pero yo siempre he sido bastante bruta y no me dejaban. En 2018 mi padre tenía una apuesta con los troncos preparados para entrenar y aburrida en casa comencé a darle golpes. Cuando mi padre preguntó quién había cortado, me comentó que si me había gustado que siguiera.
–¿Hay muchas mujeres?
–Ahora parece que se están acercando más. En harrisajotzaile sí hay más, pero la aizkolaritza es más difícil y necesitas contar con un equipo, para las hachas y los entrenamientos. El año pasado en el campeonato de Euskal Herria nos presentamos 11 chicas.
–¿Qué es lo más complicado de esta práctica deportiva?
–Muchos piensan que somos unos brutos y ya está. Pero no es así, físicamente tenemos que estar muy preparados para prevenir lesiones y requiere una técnica.
–¿Qué entrenamiento hace?
–Dos veces a la semana voy al gimnasio. Otras dos corto y un día o dos voy al monte a andar. Casi una sesión de entrenamiento al día. Si quieres dar la talla tienes que entrenar bien.
–El entrenamiento con el tronco lo hace en casa...
–Sí, tengo la suerte de que mi padre siempre ha tenido mucha afición y lo tiene preparado. También mi hermano corta y entre los dos me asesoran mucho, ya que es un deporte muy técnico y tienes que ir perfeccionando todo para avanzar. Es un deporte en el que siempre tienes algo para mejorar, nunca llegas a hacerlo perfecto.
–¿La mujer aizkolari tiene menos ocasiones de competir?
–Ahora creo que está mucho más igualado porque hay que decir que los chicos tampoco tienen muchos campeonatos al ser un deporte minoritario. Es verdad que muchas veces las mujeres a los campeonatos vamos de relleno, pero poco a poco van contando más con las chicas.
–¿Y en herri kirolak en general?
–Hay distancia con respecto a otros deportes, pero de chicas y de chicos. Tenemos poca visibilidad.
–Ha ganado la Urrezko Aizkora pero a nivel mediático sin demasiada repercusión.
–Eso sí que se nota mucho. Yo he ganado este campeonato, pero no se ha enterado mucha gente. Está claro que, como en todo, se da más visibilidad al masculino.
–Para terminar, se cierra un ciclo.
–El domingo fue el último campeonato organizado por la empresa Egur Sport. Les quería dar las gracias ya que para mi primera plaza me llamaron ellos y es un orgullo que la primera txapela la haya conseguido con ellos. Han luchado mucho para sacar chicas y jóvenes a las plazas. Es algo que se agradece.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.