El valor de contar con una cartera diversa de vacunas COVID-19 adaptadas
El COVID-19 sigue siendo una preocupación sanitaria en todo el mundo

Mientras que la Organización Mundial de la Salud ha declarado oficialmente que la emergencia sanitaria por Covid-19 ha terminado, lo cierto es que el COVID-19 sigue siendo una amenaza para la salud pública. La situación epidemiológica actual en España es estable, de acuerdo con la información proporcionada por hospitales y redes centinela de Atención Primaria a través de los informes semanales de SiVIRAS. No obstante, los expertos auguran un repunte de casos con la llegada del invierno además de un incremento de contagios.
Ante esta situación, es importante mantener la vacunación de la población frente al SARS-CoV-2, especialmente, a las poblaciones vulnerables. Se ha demostrado que las vacunas contra el COVID-19 disminuyen el riesgo de desarrollar la enfermedad de manera grave así como de hospitalización e, incluso, de un posible fallecimiento por esta causa.
El virólogo Raúl Ortiz de Lejarazu, profesor de Microbiología y asesor científico en el Centro de Gripe, en Valladolid, sostiene que “nos encontramos en un momento, en el que más que nunca, se debe mantener la prevención activa, sobretodo en aquellas personas que son más vulnerables”. No obstante, también es importante que todo el mundo se vacune contra la COVID-19 para protegerse y proteger a sus seres queridos esta temporada.
Vacunas adaptadas
La aparición de nuevas variantes del SARS-CoV-2 ha enfatizado la necesidad de contar con vacunas adaptadas a esas variantes para que se pueda proteger eficazmente a la población.
Hace unos meses, el Grupo Asesor Técnico de la OMS concluyó que la vacunación debe llevarse a cabo con vacunas adaptadas a la variante XBB.1. Son variantes que pueden dar lugar a futuras nuevas variantes que circularán a corto y medio plazo.
Estas recomendaciones han sido también amparadas por la Agencia Europea del Medicamento (EMA) y el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) que también han apuntado la necesidad de actualizar la composición de las vacunas para hacer frente a las nuevas variedades del SARS-CoV-2.
Ante esta situación, el doctor Antoni Trilla, epidemiólogo y catedrático de Medicina Preventiva de la Universidad de Barcelona ha señalado que: “Las recomendaciones de la OMS son claras en cuanto a que la vacunas a utilizar en esta campaña de vacunación y deberían incluir únicamente una cepa del virus derivada de la familia XBB de subvariantes de Ómicron. Son vacunas que pueden emplearse tanto para dosis de refuerzo como para primovacunación".
Diversidad de vacunas
A día de hoy, contamos con dos tipos de vacunas COVID-19 adaptadas a las nuevas variantes aprobadas para su uso en los países miembros de la Unión Europea. Se trata de las vacunas de ARN mensajero (o ARNm, que utilizan parte del código genético del coronavirus); y las de proteínas (que contienen una proteína específica del coronavirus).
A medida que la COVID-19 sigue evolucionando, los gobiernos y los sistemas sanitarios deben permanecer vigilantes ante la aparición de nuevas cepas y apoyar el acceso equitativo a las vacunas.
Las diversas opciones de vacunas son vitales para generar confianza, garantizar el acceso, y la facilidad de despliegue. Una de las lecciones que nos ha enseñado la pandemia de COVID-19 ha sido la importancia de diversificar las cadenas de suministro para garantizar que la población pueda acceder a tratamientos, medicamentos y vacunas que realmente puedan mejorar la salud y salvar vidas. “Depender solo de una vacuna o de un tipo de tecnología es arriesgado”, apunta el doctor Ortiz de Lejarazu.
“Sin duda hacen falta más vacunas, tanto actualizadas a la posible evolución del SARS-CoV-2 como fabricadas con distintas tecnologías que ofrezcan los mejores perfiles de seguridad y efectividad posibles. Además, se deben considerar otros aspectos logísticos como coste-efectividad o facilidad de almacenamiento, distribución y administración”, asegura el doctor Trilla.
Vacunas COVID-19 actualizadas
“Es importante para la población contar con vacunas COVID-19 actualizadas que siguen las recomendaciones emitidas por las autoridades sanitarias nacionales e internacionales (OMS, EMA y FDA, fundamentalmente) al respecto de qué variantes incluir”, añade el epidemiólogo.
Por su parte, el doctor Ortiz de Lejarazu destaca que: “El uso de vacunas que tengan cepas del virus antiguas que ya han desaparecido y no van a circular nunca más no sirven para las dosis de refuerzo en el momento actual de la pandemia. Dichos refuerzos tienen que hacerse con variantes actuales para generar anticuerpos que protejan contra las variantes circulantes en la actualidad”.