ANTXON ETXEBERRIA
zarautz.
Domingo, 19 de julio 2020, 00:47
Ignasi Serrahima Arbestain (Barcelona, 1969), autor de la novela 'El mapa del fin del mundo' que trata sobre la expedición de Juan Sebastián Elcano en la primera vuelta al mundo, pasa temporadas en Zarautz, en casa de su madre, en Villa Montserrat, en el parque del Gure Ametsa. Aunque él es catalán, reside en Madrid (Chamartín) y siempre que su trabajo se lo permite, se escapa y viene encantado a Zarautz con su mujer y sus cuatro hijos. Su abuelo, Iñaxio Arbestain, era del caserío Arbestain, de Urteta, y fue quien le inculcó el interés por la increíble gesta del marinero getariarra, que lo ha plasmado en este novela histórica que está teniendo muy buena aceptación.
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–¿De dónde surge su interés por Elcano?
–Yo soy admirador de Elcano desde mi infancia, cuando mi abuelo Iñaxio Arbestian me contaba historias de Elcano, me llevaba a visitar su estatua a Getaria...; llevo muchos años estudiando y coleccionando todo lo publicado sobre la expedición que dio la primera vuelta al mundo. Con esta obra quiero contribuir a divulgar la vida de quien quizá fue el mayor navegante que ha dado la historia.
DIVULGA SU VIDA
GRAN ACEPTACIÓN
–Entonces, ¿es usted nacido en Barcelona?
–Mi bisabuelo era mayordomo de la familia Güell de Barcelona y mi abuelo nació allí, aunque mi madre, Inmaculada Arbestain, lleva toda la vida veraneando en Zarautz. Tiene casa aquí, por lo que cuando podemos, nos escapamos a Zarautz. Mi abuelo siempre decía que éramos descendientes de Elcano, le apasionaba su gesta. Yo crecí con la idea de Elcano, de su increíble vuelta al mundo. Siempre he ido comprando libros y documentación de segunda mano sobre lo que realizó.
-Y, ¿se le ocurre escribir una novela sobre ello?
–No soy historiador, soy contador de historias, y se me ocurrió novelar su gesta desde su punto de vista. Es Elcano quien cuenta su hazaña en la novela. Los datos que se aportan en el libro son reales, aunque es verdad que hay episodios suyos poco conocidos, sobre todo de su infancia y juventud; es ahí donde me he permitido novelarla, que para mí ha sido muy divertido escribir sobre sus amoríos, pero siempre aportando datos que dejó en su testamento, como que tuvo una hija con Mari Ernialde y un hijo con Mari Vidaurreta, que debieron morir siendo jóvenes.
–'El Mapa del fin del mundo', ¿es su primera novela?
–No, ya es mi tercera publicación. Soy el autor de las novela 'Onesimus' (La conspiración) y 'La mare del temps', y de la novela corta 'El déu sorollós', ganadora del premio Cerqueda Escaler 2015. 'El Mapa del fin del mundo' es mi primera novela histórica. Y se ve que la editorial ha quedado contenta, puesto que acabo de firmar contrato para una nueva novela que ya la estoy escribiendo, también histórica, pero que nada tiene que ver con Elcano. Yo siempre he escrito, aunque en España, desgraciadamente, de las novelas que publican viven my pocos escritores. Yo estudié económicas y soy consultor financiero, profesión que compagino con la escritura. He trabajado en la banca durante 20 años, luego de consultor financiero viajando mucho por el mundo y ahora estoy en una empresa inmobiliaria.
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–Entonces, la gesta de Elcano, ¿tiene aceptación?
–Eso parece. Lo publique en octubre del pasado año y hasta diciembre se habían vendido 4.000 ejemplares, 20 por día, que no está nada mal. De hecho hace unos días acudí a la librería Garoa, de aquí y sí que lo tenían.
–¿Qué cuenta en el libro?
–Se cuenta el último viaje de Elcano, que se lo va contando el propio Elcano a Andrés de Urdaneta: su vida en Getaria, como embarcó en la expedición de Magallanes y todas las peripecias para dar la vuelta al mundo, todo bien documentado, aunque también introduzco algunas interpretaciones mías que, por otra parte, creo son las correctas, tras lo escuchado a mi abuelo y tras lo que he ido investigando.
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–¿Qué opinión le merece lo realizado por Elcano?
–Una hazaña inconmensurable, aunque ha sido muy maltratado por la historia. Mucha gente se piensa que fue Magallanes quien dio la vuelta al mundo, pero no, Magallanes organizó la expedición y falleció en Filipinas. Lo de Juan Sebastián Elcano fue una gesta increíble. Cruzó mares, en unas condiciones infrahumanas. Fue una expedición que arribó a Sanlúcar de Barrameda tres años más tarde, con 18 hombres maltrechos. Resaltar que llegaron con el navío lleno de especias, por lo que la expedición incluso reportó beneficios, convirtiéndose en la primera embarcación de la historia en dar la vuelta al mundo.
–¿Era consciente Elcano de que había dado la vuelta al mundo?
–Totalmente consciente; quería ser el primero en dar la vuelta al mundo, aunque me entristece que no se le haya hecho justicia, fuera de nuestras fronteras no se le conoce. Ha sido el mayor navegante de la historia; liderar una embarcación maltrecha por los océanos, con las tormentas del Pacífico, con mapas inventados ... Yo le doy más mérito que el primer viaje a la luna. Entonces sabían a donde iban, pero Elcano fue resolviendo situaciones sobre la marcha. Embarcaron 235 hombres, pero llegaron sólo 18.
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–¿Cómo acabó la vida de Elcano?
–Tras su gesta, el Rey Carlos I le prometió 500 ducados de renta vitalicia, que no cobro, que luego reclamó a la Corte su madre, Elena del Puerto. Elcano falleció joven, en 1526, en la siguiente expedición al Maluco, conocida como Expedición de Loaysa, por una intoxicación. En la misma expedición fallecieron 4 hermanos más de Elcano, de los 7 que eran. A partir de entonces Elcano comenzó a quedar en la sombra, aunque muchos le seguimos recordando.
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