«El Rey me preguntó qué pasaba con Chillida Leku»

El rey Felipe VI inauguró el pasado 23 de noviembre las nuevas instalaciones de Campofrío en Burgos. También la escultura de Pedro Txillida. «Era un día de nieve, con clima adverso, y había quien pensaba que el Rey no llegaría hasta ahí fuera, pero él quiso, y me pidió que le explicara la obra», rememora el escultor.

La charla se extendió. Porque Felipe VI recordaba su visita a Chillida Leku en el viaje de luna de miel con Letizia, cuando aún eran príncipes. «Ellos quisieron visitar San Sebastián en aquel viaje y recorrer Chillida Leku, y a mí me tocó ser el guía. Estuvieron muy interesados en la obra de mi padre y en los detalles de Zabalaga, que todavía estaba abierto al público».

Así que el Rey quería saber, ahora, por qué ese espacio estaba hoy cerrado y cuál es su futuro. «Le conté que nuestra familia no podía seguir haciendo frente a las pérdidas, pese al éxito de visitantes del museo, y que habíamos estado hablando con las instituciones pero todo se había frustrado al final», cuenta un Pedro Txillida que no quiere extenderse en la cuestión, en la línea de discreción que ha adoptado la familia, aunque deja entrever su decepción por el comportamiento de los políticos. «Sí le dije que nuestro propósito es mantener y preservar el legado de mi padre en la medida de nuestras posibilidades», concluye.