Lo que sigue

Sucesos de este tipo, sin embargo, son proclives a dejar ocultos escenarios de gran calado que soportan la base del espectáculo. Mi primera reflexión, va a la línea de flotación. ¿Hubiera sido posible un triunfo de tal repercusión, sin un toro que estuviera a la altura de la dimensión y duración de esa lidia? El juego de 'Ligerito' de Domingo Hernandez fue extraordinario. Pero todo no queda ahí. El lunes 24 se lidió una corrida de Matilla en la que destacó un excelente 'Filósofo' lidiado por Emilio de Justo, al que también se le dio la vueta al ruedo; ejemplo de transmisión, duración y bravura. Del mismo, Alvaro Nuñez del Cuvillo pidió al ganadero sus genitales para reproducción asistida y refresco de su cabaña brava. Pero además no puede quedar sin destacar la excelente corrida de Victorino Martín, de presentación irreprochable, con cuatro toros ejemplo en su juego de lo mejor y más característico del encaste Saltillo. Mucha sustancia en una Feria de Sevilla que va a marcar el contenido del tipo de toro y el concepto del toreo que en adelante la afición reclamará.

Nos queda no repetir nuevamente una temporada rutinaria. Nos queda salir del ahora viene San Isidro, luego Pamplona, Blibao y así hasta El Pilar. Necesitamos improvisación y valentía para explotar los buenos mimbres que se ha demostrado tenemos entre manos. ¿Se imaginan el mes de junio con un Morante / Roca Rey en Bilbao? Y queda pendiente un cartel cumbre que cualquier buen empresario debiera estar persiguiendo. Dos encastes diferentes para José Tomás, Morante y Roca Rey. Soñar es libre.