«Estamos preparados y bien aprovisionados; será una locura, parecido a los partidos de rugby»

Aunque por el barrio todavía no se ven seguidores del grupo alemán, en los bares sí se percibe cierto movimiento. Los bidones de cerveza se acumulan en los almacenes, y este martes muchos establecimientos empezarán a colocar barras supletorias. «Desde hace unos días el teléfono no deja de sonar, pero no vamos a admitir reservas para este miércoles», explica Yovana, desde la barra del bar Chopper. «Todo se servirá en el momento».

En el bar Gu este lunes fue jornada de «zafarrancho», «estamos poniendo todo a punto», advierte 'Blus' desde su establecimiento decorado con bufandas de la Real, pero donde «siempre suena música de rock and roll». Para este miércoles tienen «cerveza a patadas», y también previsión de preparar «muchos bocadillos». 'Blus' prevé que será una jornada intensa para los hosteleros, y lamenta no poder acudir al concierto como aficionado. «Me tocará trabajar y mucho, pero yo ya les vi cuando actuaron en el BEC, me queda ese consuelo».

En el bar Sacha también se acumulan los bidones de cerveza en el fondo del local. «Estamos preparados», admite Alberto, quien asegura que un concierto de estas características nada tiene que ver con un partido de fútbol de la Real. «Los días de partido la gente suele venir una hora antes, a tomar algo, no a comer. Esto será algo parecido a los partidos de rugby, porque vendrá mucha gente de fuera, que antes de entrar querrá comer algo». Para atender a todos, el personal del bar se reforzará, «este miércoles estaremos trabajando siete personas».

Parecida imagen se repite en el bar Arkupe. «Lo de este miércoles va a ser algo gordo, seguro», adelanta Javi. También coincide en señalar que la previsión que barajan es parecida a la que manejan con los partidos de rugby, aunque en esta ocasión, que el concierto sea un día entre semana, en su opinión «es una incógnita». Sin embargo, la experiencia vivida con otros conciertos de estas características le lleva a estar tranquilo. «Esta gente es muy educada, y además pagan antes de consumir».

En el caso de María, del bar Jon Ander, tuvo que buscar en internet información del grupo. «No los conocía», admite. Pero ya tienen todo preparado en el bar, «bocadillos y mucha cerveza».