Concierto

La noche que Tina Turner casi 'incendió' el Polideportivo de San Sebastián

La cantante fallecida el miércoles protagonizó un 'movido' concierto en Donostia en 1981 y canceló la gira que le hubiera traído en 1996 al Estadio de Anoeta

Alberto Moyano

San Sebastián

Viernes, 26 de mayo 2023, 02:00

Por dos veces aparece vinculado el nombre de Tina Turner al de Donostia: la primera, el 15 de mayo de 1981, con motivo del concierto que ofreció en el Polideportivo de Anoeta; la segunda, el 12 de julio de 1996, cuando debía actuar ... nada menos que en el Estadio de Anoeta, pero el concierto no se celebró porque se canceló la gira europea.

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Han pasado 42 años, pero aún hay aficionados que recuerdan aquel lejano concierto en el Polideportivo donostiarra, al que asistieron 2.500 personas según las crónicas de la época y algunas menos según la memoria de algunos asistentes. Fue un viernes, 15 de mayo de 1981, y la artista fallecida este miércoles no llegaba en su mejor momento. Tenía 41 años, cinco antes había solicitado el divorcio de Ike Turner, por aquel entonces adicto a la cocaína, bipolar y maltratador, no había publicado ningún disco desde 'Love Explosion' (1979) y aún faltaban otros tres años para que su trayectoria explotara de éxito con el disco 'Private Dancer'.

En una noche con un tiempo de perros, el concierto donostiarra empezó mal debido al retraso de la artista y a la actuación de un grupo telonero, no anunciado, que exasperó al público. Si la actuación estaba prevista para las 21.00 horas, la realidad es que Tina Turner no pisó el escenario hasta la medianoche. Tres horas de demora que los organizadores atribuyeron primero a un fallo técnico y después, a la indisposición de uno de los músicos de la banda. Nada que no fuera relativamente habitual en aquellos tiempos.

La entrada del concierto.

«Un animal de escenario»

Fuera como fuese, la larga demora provocó que los espectadores recibieran con frialdad o incluso cierta hostilidad a la cantante cuando finalmente se subió al escenario con esas tres horas de retraso sobre el horario previsto. «Iba vestida con un disfraz blanco de mariposa, con alas en la espalda. Y un tanto 'perjudicada'». No obstante, añade esta persona, «al principio, fue recibida con una pitada, pero cuando empezó el concierto, rápidamente el público entró en calor y se animó porque Tina era un animal de escenario». En efecto: «Agresividad» y «fuerza» son algunas de las palabras que se usaron para describir la actuación. Sobre el escenario del Polideportivo, la cantante interpretó temas de los Beatles, los Stones y Neil Diamond, además de los salidos de su repertorio. Y todos sonaron como si fueran propios. En aquella visita la cantante se alojó en el Hotel María Cristina, rememora este veterano seguidor de la artista.

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Asistentes a la actuación de 1981 en Donostia coinciden en que sin estar en su mejor momento, ofreció un show digno

Un veinteañero Miguel Martín asistió al concierto y nada menos que en primera fila. «Visualmente te atrapaba. No fue una experiencia top, pero me alegro de haberla visto en aquella ocasión». El responsable del Jazzaldia indica que «no era una buena época para ella, que estaba intentando reconducir su carrera tras separarse de Ike». Recuerda Martín que «vino con una banda que no era nada del otro mundo y de voz tampoco andaba demasiado bien. Sí estuvo acompañada de las tres coristas. Se puede decir que visualmente su imagen era homologable a la que conocíamos de siempre y que musicalmente no fue nada del otro jueves». En cuanto al retraso en el inicio del concierto, le resta importancia: «Era otra época. Cada concierto era épico».

También estuvo en este concierto de Tina Turner en San Sebastián el responsable de Get In, Iñigo Argomániz, que con los años tendría ocasión de trabajar con la artista, con motivo del concierto que ofreció en 1987 en Bilbao. «Nos pidió un petaco para jugar en el camerino». De la actuación de 1981 en el Polideportivo, confiesa que no guarda muchos recuerdos, excepto que «no hubo mucha gente y no fue un buen concierto».

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Con las entradas impresas

En 1996, Tina Turner se embarcó en el 'Wildest Dreams Tour' para promocionar su disco homónimo y se anunció que el lunes 12 de agosto –en plena Semana Grande donostiarra–, actuaría en el Estadio de Anoeta, en el que hubiera sido el primer gran concierto en ese recinto. Al día siguiente tenía concierto en Gijón y al siguiente, en Vigo, pero ninguno se celebró porque, a pesar de que incluso las entradas llegaron a ponerse a la venta, la gira europea se canceló a última hora. En septiembre de ese mismo año volvió a España, pero esta vez ya no pasó por Donostia: únicamente ofreció dos conciertos en Barcelona y un tercero en Madrid.

«Gracias a dios se canceló el concierto previsto en 1996 en el Estadio de Anoeta porque no iba a ir bien», admite Argomaniz

A día de hoy, Iñigo Argomaniz, que por entonces aún trabajaba en Tiburón Concerts, señala que «teníamos mucha ilusión por aquel concierto, pero visto con la perspectiva que da el tiempo, gracias a dios que se suspendió porque no iba a ir bien. Me quedo con el concierto de 1987 en la plaza de toros de Bilbao, que fue la bomba».

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Hay una tercera ocasión en la que el nombre de Tina 'rondó' San Sebastián, aunque en realidad no: en 1993 el Zinemaldia proyectó en la gran pantalla del Velódromo el biopic 'Tina' ('What's Love Got to Do with It'), de Brian Gibson y protagonizada por Angela Bassett, que vino a Donostia para presentar la película.

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