
La agenda portátil
Nada es lo que parece: 'La Mesías' y uno de ElgoibarSecciones
Servicios
Destacamos
La agenda portátil
Nada es lo que parece: 'La Mesías' y uno de ElgoibarPara qué voy a ver 'La Mesías', la serie de 'los javis', si ya me imagino que será un desparrame? ¿Por qué debo leer el ... libro de Zuhaitz Gurrutxaga, si ya me sé su historia de futbolista reconvertido? Ese era yo. Pero amigos, nada es lo que parece.
Cuando la serie de Movistar pasó por el Zinemaldia recibimos al equipo de 'La Mesías' como otra 'troupe Almodóvar', gente tan divertida como imaginativa. Pronto empezó la ola: es la serie del año, decían. Qué presión. Pues ya la he visto: esta historia de mujeres que hablan con Dios, extraterrestres, niños cantantes y personajes exagerados conforma un conglomerado literalmente «alucinante», lleno de hallazgos y actuaciones notables. Digamos que no es la ideal para quienes disfrutan de las series británicas de señores y criados, pero atrapa. Sí: es la serie del año hasta que dentro de una semana haya otra serie del año.
Lo mismo me ha ocurrido con 'Subcampeón', el libro de Zuhaitz Gurrutxaga y Ander Izagirre. Al segundo le sigo desde siempre; del primero me sé su paso de futbolista a showman hasta el punto de que fui yo el Tribulete que le entrevistó el día que iba a debutar como inesperado monologuista en el Doka. Me sentía obligado a leer su libro conjunto, pero confieso en esta esquina íntima que tomé el ejemplar con un punto de pereza. «Ya me sé la historia», me decía.
Pero fue abrir el libro y no parar de leer hasta terminarlo. 'Subcampeón' es una obra tan redonda como los balones que afloran en sus páginas, aunque su valor no está en los balones ni en los fueras de juego, sino en la valentía de Gurrutxaga al contar sus miedos y problemas psicológicos cuando era un futbolista de Primera. Aviso: 'Subcampeón' no es solo un libro para futboleros (que también), es la crónica de la Euskadi de los últimos cuarenta años, con ese Gurrutxaga nacido en el rural barrio de San Miguel de Elgoibar, que naufraga en los estadios y que acaba triunfando, o así, en los escenarios y en los platós. Y sobre todo el strip-tease del 'loco' que conquistó incluso al 'loco' Bielsa.
Por 'Subcampeón' desfilan desde el doctor Gallo hasta el gran Javier Expósito, Javier Clemente que sale bien parado y Toshack que aparece mal, el grupo Sidonie como presunto robanovias, algunas chicas guapas y Lee Chun-Soo en Bataplán. Hacía tiempo que no disfrutaba tanto con un libro, de la risa a la emoción, gracias a ese dúo, Gurrutxaga e Izagirre, que suena a pareja de pelotaris o a dupla de centrales.
Cuando hace unos días pasó Juan Tallón por Donostia con su libro 'Obra maestra' recordamos que desde hace tres años hay en el Palacio de Miramar una gran escultura de Richard Serra (el californiano que en realidad es como de Bilbao, según Tallón), pero observé que poca la gente lo sabía. Esta semana paseé por sus jardines. Ahí sigue, discreta pero rotunda. Se llama 'Pentágono en sentido contrario a las agujas del reloj', es una cesión de la galería Carreras Múgica de Bilbao y configura un eslabón recatado en la 'ruta de las esculturas'.
P.d.1 Es una maravilla ver cómo se llenan los actos de Literaktum. El lunes el público hacía cola en Anoeta no para un partido de Champions, sino para escuchar a Gioconda Belli en la Ernest Lluch. El miércoles Antonio Muñoz Molina llenó el Principal. Queda una semana.
P.d. 2 El tolosarra Antxon Elósegui Larrañeta (no confundir con su padre Antxon Elósegui, mi más joven amigo) es nuevo presidente del Orfeón Donostiarra, estupenda noticia para quienes conocemos su capacidad de gestión y sobre todo su talante, porque hay destinos, como éste, que requieren tanto talento como empatía. El Orfeón es una de las grandes instituciones de este país, que mantiene su calidad de siempre pero necesita un 'aggiornamiento' en su gestión. Suerte.
P.d. 3 Me siguen preguntando por la calle por mis gafas naranjas: no, no han aparecido. Pero gracias a unna 'hada madrina', María Aranguren, mi óptica de cabecera en Carlos I, ya tengo nuevas gafas naranjas, esas 'gafas de txotxolo' (como las llamaba mi hijo), como las que tuvo Arzak, son eternas para Colomo y lleva el protagonista de 'Nada'. Gracias a María la vida vuelve a ser levemente anaranjada, como un fotograma de Vittorio Storaro...
mezquiaga@diariovasco.com
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
No te pierdas...
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.